Aprender a hablar con las manos

Un taller en Huesca introdujo a los niños el lenguaje de signos

Un momento del taller de lenguaje de signos.
Un momento del taller de lenguaje de signos.
Rosa Calvo

La aventura de un robot, un astronauta y una niña para regresar a su planeta fue el hilo conductor del taller organizado esta semana en la librería Romeo y Julieta de Huesca. Las palabras estaban prohibidas, ya que el objetivo de la actividad era que los pequeños conocieran el lenguaje de signos a través del libro ‘¡Manos Arriba!’ de Marisol Arqued y María Graziano, el primer proyecto de literatura infantil inclusiva, editado por Micubo, en colaboración con la editorial Descosido.


Arqued fue la encargada de contar la historia y explicar a los pequeños algunas palabras a través del reto de descifrar las adivinanzas que presenta el libro, gracias a una enorme lavadora de cartón de la que se extraían las pistas. Para ello se acompañó de Leticia Solans, intérprete de Pares Sueltos, un proyecto dedicado a las artes escénicas con personas con discapacidad, que se encargó de trasladar al lenguaje de las manos todo lo que se decía.


“En el mercado hay pocos libros así, por lo que nos pareció muy interesante organizar una actividad en torno a él, para que los pequeños se familiaricen ya desde la edad temprana con otro tipo de comunicación”, explicó Rocio Ortega, propietaria de la librería.


Además de participar en la historia y descifrar las adivinanzas, los niños, de entre 3 y 6 años aprendieron cómo aplaudir en lenguaje de símbolos o cómo expresar los colores, además de algo que les caracterizara. Así, el pequeño que tenía el pelo rizado aprendió a decirlo a través de sus manos.


La actividad estaba dedicada a un público familiar, por lo que los padres se implicaron activamente en la realización, y se les otorgó unas pautas para poder continuar aprendiendo sobre el lenguaje de signos mediante la lectura de ‘¡Manos Arriba!’.


“Nuestro objetivo es seguir colaborando con Marisol Arqued en talleres de este tipo, porque consideramos que es muy importante que los niños conozcan también el lenguaje de signos, así como otras formas de comunicación, para facilitar su normalización y con ello la integración”, valoró Ortega.


La papelería Romeo y Libreta abrió recientemente sus puertas en el número 8 de la calle Joaquín Huesca de Huesca, y además de contar con títulos como ‘¡Manos Arriba!, dispone de todo tipo de material de escritorio y regalos especiales. También se organizan talleres creativos enfocados especialmente a un público familiar.

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