El tramo Campo-congosto del Ventamillo da un nuevo paso al publicarse el proyecto

El comienzo de las obras de acondicionamiento del tramo de la carretera N-260 entre Campo y el congosto del Ventamillo, en el Alto Valle del Ésera, parece estar más cercano con la publicación en el Boletín Oficial de la Provincia de Huesca de la información pública del proyecto. El trámite supone dar a conocer también la relación de bienes a expropiar necesarios para realizar la reforma de la vía. Se abre un plazo de veinte días hábiles para que los particulares y administraciones que así lo consideren puedan presentar las alegaciones que entiendan oportunas.

La Dirección General de Carreteras ha aprobado provisionalmente el denominado proyecto de construcción de acondicionamiento de la N-260, entre el punto kilométrico 388,100 y 389,100 y del 390,400 a 404,150 y ordenado a la Demarcación de Carreteras del Estado en Aragón la incoación del expediente de información pública durante un plazo de 20 días hábiles contados a partir del siguiente al de la última fecha de las publicaciones reglamentarias. La documentación podrá ser consultada, en días y horas de oficina en la Demarcación de Carreteras del Estado en Aragón, en la unidad de Carreteras del Estado en Huesca y en las corporaciones locales afectadas, que son Seira y Campo.

Las obras diseñadas se centran en la actuación en casi 15 kilómetros de la N-260, los que van desde la salida del túnel del congosto del Ventamillo a la entrada de la localidad de Campo, y contemplan el ensanchamiento de la plataforma de vía para permitir el cruce de dos vehículos pesados y la construcción de dos túneles de 212 y 470 metros con una inversión estimada de unos 76 millones de euros.

Después de innumerables bloqueos por temas medioambientales, se decidió dejar fuera del proyecto definitivo el tramo del congosto para el que no existe, de momento, ningún tipo de actuación prevista. "Queda también fuera del proyecto publicado en el Boletín el tramo de la travesía de Seira, pero los técnicos me han asegurado que en este punto se ha previsto una actuación específica", explica el diputado del PP y concejal benasqués Manuel Mora.

Este tramo de la N-260 apenas tiene una anchura de calzada de 5,5 metros, no cuenta con arcenes ni puntos de ensanchamiento y presenta numerosas curvas de radio reducido en las que no se puede circular a más de 40 kilómetros. La estrechez de la vía dificulta enormemente, y numerosas veces lo impide, que se crucen dos vehículos pesados, lo que suele ocasionar numerosos embotellamientos e incidentes.

"A mí ya me han hecho llegar dos personas particulares su intención de presentar alegaciones por distintos motivos y es previsible que sean tenidas en cuenta porque lo que piensan plantear es muy lógico", comenta Mora, quien hace unas semanas presentó una enmienda a los Presupuestos Generales del Estado para conseguir una dotación presupuestaria con la que mantener vivo el proyecto. No fue mucho el importe consignado, tan solo 365.000 euros para el ejercicio de 2016, pero se preveían a partir de entonces unas inversiones plurianuales hasta 2019 de algo más de nueve millones de euros.

Mora ha mostrado su satisfacción por esta publicación en el Boletín tras una legislatura que ha definido como "muy complicada" y recuerda que se ha conseguido la declaración de impacto ambiental positiva, la realización del proyecto constructivo y su presentación para posibles alegaciones y la dotación económica plurianual, "siempre y cuando se respeten estos presupuestos". Entiende que, con el paso que se da ahora, el proyecto está "lanzado", que era lo más difícil, pero reconoce que habrá que seguir insistiendo en la necesidad de sacar adelante la reforma de esta vía que es considerada en la zona como imprescindible, por seguridad y para el desarrollo económico y social.