La localidad de Grañén despidió este domingo con una gran cena popular sus fiestas patronales en honor de Santiago Apóstol. El acto, que tuvo lugar en la plaza, permitió visualizar la unión y convivencia vecinal vivida durante cuatro intensas jornadas. De hecho, la actividad resultó muy participativa y de nuevo, fue un ejemplo de trabajo en equipo y colaboración al ser elaborado el menú por los integrantes de la asociación local Santa Ana.

A lo largo de la jornada, hubo además otros actos destacados. Entre ellos, un taller divulgativo de ingeniería con cohetes propulsados, así como un partido amistoso entre los equipos de Grañén y Almudévar. Antes de iniciarse el encuentro, el club local rindió un homenaje a la figura de Mariano Cervera y también a los integrantes de la anterior junta gestora. Del mismo modo, los niños fueron protagonistas gracias a un gran parque acuático y al desarrollo de las cucañas a cargo de la Peña Zaragocista Bresca de Grañén.

Asimismo, la última jornada permitió llevar los concursos de gastronomía, parchís y peonzas. Tras la cena, como colofón, estaba prevista la actuación de Los Dulzaineros del Bajo Aragón y la quema de una gran colección de fuegos artificiales. El alcalde del municipio, Carlos Sampériz, realizó un balance positivo de las fiestas, pues la mayoría de los actos han registrado una participación muy alta. Entre ellos, el chupinazo, que consiguió contar con la presencia de una decena de carrozas y que fue el marco ideal para elaborar la sangría más grande del mundo. En este último caso, la hazaña fue certificada por notario y perito, lo que permitirá llevar a cabo los trámites oportunos y entrar en el Libro Guinness de los Récord. En total, fueron elaborados 1.150 litros. "La respuesta de la población ha sido muy buena y, por lo tanto, todos hemos disfrutado de unas fiestas con un gran ambiente. Además, como viene siendo habitual en los últimos años, hemos contado con una gran colaboración de la gente joven así como de las asociaciones locales", subrayó Sampériz. Así, entre otros ejemplos, el primer edil citó las 17 parejas inscritas a la yincanas de padres e hijos así como la gran afluencia de público durante la actuación del grupo local de tambores.

Aunque fuera del programa festivo, los vecinos todavía podrán disfrutar esta semana de una atractiva y singular actividad. En concreto, uno de los ilustradores más internacionales del momento, Ricardo Cavolo, llegará este lunes a la localidad con el fin de elaborar un nuevo mural en plena resaca festiva. La obra se unirá a otras muestras de arte urbano existentes en la localidad, entre las que destacan los trabajos de Isacc Mahow e Íker Henn.