El Gobierno de Aragón ha reanudado las obras de emergencia, que paralizó con motivo de las fiestas de Navidad, en la parte posterior de la Catedral de Huesca para garantizar la seguridad del edificio.

Estas actuaciones evitarán la caída de cascotes a la vía pública, ha explicado el delegado de Patrimonio de la Diócesis de Huesca, José María Nasarre, quien ha expuesto que se eliminarán "aquellas escamas que tienen algunos sillares que pudieran desprenderse".

Asimismo, Nasarre ha informado de que el Gobierno de Aragón se ha comprometido a llevar a cabo a lo largo del 2015 una actuación para la conservación y restauración de los pináculos.

Tiempo atrás, Nasarre alertó de la situación en la que se encuentran los pináculos, debido al paso del tiempo, las inclemencias meteorológicas y la presencia de cigüeñas, por lo que solicitó la elaboración de un plan director. El delegado de Patrimonio aseguró que si en 10 años no se actuaba en los pináculos, estos podrían desaparecer.