La localidad de Grañén vivió ayer el chupinazo más colorido de su historia. A pequeña escala, los asistentes inauguraron sus fiestas recreando la celebración hindú dedicada a la llegada de la primavera (Holi Festival) y para ello, se lanzaron alrededor de 20 kilos de polvos de colores. El acto solo duró unos segundos si bien fueron suficientes para dotar de singularidad el arranque festivo. 

Además, el inicio de las fiestas, que se prolongarán hasta el próximo domingo, resultó muy participativo. De hecho, con la animación de la charanga local Los Tripas, el desfile inaugural sumó la presencia de diez carrozas, que recrearon desde personajes fantásticos hasta la celebración del día del orgullo gay. «El ambiente es muy bueno y ahora, lo deseable es que se mantenga el resto de los días», apuntó el alcalde del municipio, Carlos Sampériz. Los encargados de lanzar el cohete anunciador fueron los integrantes de las peñas Pringaos y Calimocho.

Tras este colorido chupinazo, las fiestas continuarán hoy con los actos más tradicionales, dedicados al patrón, Santiago Apóstol. Así, a partir de las 11.30, se llevará a cabo la procesión, recuperada hace cuatro años tras unos 30 desaparecida; y de forma posterior, a las 12.00, tendrá lugar la misa baturra. En esta misma jornada, otro acto esperado será la entrega de pañoletas a los niños nacidos en el último año, así como el reparto de su peso en arroz.