Muere el diplomático Máximo Cajal, de origen altoaragonés

Fue embajador en Guatemala en 1980, cuando
escapó del asalto de militares, y llegó a ser subsecretario de Exteriores.

El diplomático Máximo Cajal nació en Madrid el 17 de febrero de 1935, pero sus raíces altaragonesas de la familia le condujeron muchas veces a Vicién (Huesca). Allí reposan los restos de su padre, un oscense forjado a sí mismo que se hizo maestro y ejerció de abogado en Madrid.


Cajal fue embajador en Guatemala cuando, en 1980, la legación española fue asaltada por militares de este país e incendiada. Él pudo escapar por una ventana en llamas, huyó hasta un hospital, donde fue rescatado por el embajador de Estados Unidos, y volvieron a intentar matarlo por tercera vez camino del aeropuerto.


Luego fue cónsul general en Nueva York, embajador en la Suecia del presidente Olof Palme y representante de España en la OTAN. Cajal era licenciado en Derecho e ingresó en 1965 en la carrera diplomática, en la que era ministro plenipotenciario. Su primer destino, en Tailandia, le permitió ver in situ la Guerra de Vietnam. En su carrera llegó a ser subsecretario de Exteriores, director general de la Oficina de Información Diplomática (OID) y asesor personal del expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero en el proyecto de la Alianza de Civilizaciones.


Cajal negoció con Estados Unidos el convenio bilateral en 1988. Además, impulsó la participación de España en las misiones internacionales de la ONU, que empezó a sacar al Ejército español fuera de sus fronteras y consiguió que cambiara su imagen. .