Huesca

Un informe aconseja cerrar la residencia de Fonz por instalaciones inadecuadas

Un informe encargado por la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales del Gobierno aragonés recomienda el cierre de la residencia.

Un informe encargado por la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales del Gobierno aragonés recomienda el cierre de la residencia para ancianos de Fonz (Huesca) por carecer de unas instalaciones adecuadas para el cuidado de mayores dependientes.


La anunciada clausura de la residencia de Fonz motivó ayer la dimisión de los tres concejales del PP en la localidad por desacuerdo con la decisión adoptada por el Ejecutivo autónomo y por la ausencia de medidas para adecuar el edificio y mantenerlo abierto.


El informe, elaborado por técnicos de la consultora Albertia resalta que las "graves deficiencias" detectadas en el centro, un antiguo palacio propiedad del Obispado de Barbastro-Monzón, harían precisa una actuación integral en el centro, con un coste indeterminado y "absolutamente inviable" en relación al coste y a las plazas resultantes.


Rechaza, además, el contenido de un estudio presentado por el Ayuntamiento de Fonz que cifra en 330.000 euros la inversión a realizar en las instalaciones al entender que dicho documento no soluciona los "problemas principales" del centro, no detalla las actuaciones a realizar, y no presenta un presupuesto "realista" de las inversiones necesarias.


Según el autor de este informe, que en su visita al centro estuvo acompañado del portavoz del PP en la corporación, el edificio no cumple con la normativa actual de accesibilidad y de dimensiones en los espacios.


Carece, además, de baños adaptados y de espacios para desplazamientos laterales de usuarios y para la entrada de sillas de ruedas.


El informe señala, por otra parte, que el edificio no cumple con la normativa de incendios al disponer de una única vía de evacuación por planta; las habitaciones carecen del espacio mínimo exigido por la legislación y las puertas no disponen de la anchura suficiente.


Detecta, asimismo, problemas estructurales en el edificio que exigen labores de consolidación, humedad, instalaciones obsoletas y abundante material combustible y no ignífugo.


El informe concluye que la residencia de Fonz, a la vista de todas las carencias referidas, "debe ser cerrada o destinada a otros usos de carácter social".


Apostilla, sin embargo, que las obras de la residencia de la comarca del Cinca Medio, paralizadas en 2011, causan una "gratísima impresión" a pesar de quedar pendiente una fase para su terminación cuyo coste se presupuestó en 2 millones de euros.


Otro informe elaborado meses atrás por técnicos del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS) describe la puesta en marcha de la residencia en 1972, a través de un primer convenio de uso entre el municipio y el Obispado de Barbastro, e incide en todas las deficiencias que hacen desaconsejable su uso para albergar mayores dependientes.


Su autor se apoya en otro informe anterior de la Sección de Supervisión de Proyectos del IASS, fechado en octubre de 2005, que alertaba de la inadecuación de las instalaciones del centro y que planteaba una inversión mínima de 1,5 millones de euros para adaptarlo para albergar a no dependientes y de 5 millones para acoger a dependientes.


En la actualidad, el centro da cobijo a tres mayores dependientes y presta servicios de centro de día a otra veintena de ancianos.En sus instalaciones realizan su labor diecisiete trabajadores, entre ellos seis funcionarios.