Crecen las ventas de turismo rural por las ofertas «irresistibles»

Las ofertas y la mejora de las estrategias de promoción han llevado a la Asociación de Turismo Verde de la provincia de Huesca, que gestiona alrededor de 5.000 plazas de turismo rural en 300 establecimientos, a incrementar este verano las ventas a través de su central. Según sus datos, entre el 1 de junio y el 24 de agosto, sus operadores contrataron 465 reservas, por las 456 del mismo período de 2010.

Esto se tradujo en un crecimiento de los ingresos del 11% al pasar de 130.366 a 144.878 euros, y por tanto del gasto medio por reserva, que creció un 9% (de 285 a 311 euros). «Los propietarios han trabajado muy bien los precios y han lanzado ofertas puntuales irresistibles, y eso ha hecho que se salvara la campaña», asegura Paco Parra, presidente de la Asociación Turismo Verde. Aún así, estima que las ventas realizadas este verano por los propietarios de los alojamientos a título individual (sin la intermediación de la central) han caído un 10%.

«El barullo de internet»

La central ha recibido este verano 2.848 solicitudes de información a través del teléfono o del correo electrónico, mientras que el año pasado llegó a 3.307. Para Paco Parra, la causa de que se hayan aumentado las ventas pese a esta bajada de actividad es que «hemos podido dar una atención más personalizada de ese viajero que busca a última hora un alojamiento». «El viajero, frente al barullo de internet, ha recurrido a sistemas fiables que le facilitaban el acceso a lo que buscaba en el último momento, con lo que las asociaciones hemos conseguido mejorar los resultados», recalca.

Prueba de ello es que las visitas a la web de la asociación se han incrementado entre junio y agosto de un 17% y a un 46%, algo que Paco Parra atribuye a que «se han mejorado las campañas de promoción y el envío regular de los boletines de ofertas».

Desde la asociación, por último, apuntan que el perfil mayoritario de los usuarios de los alojamientos rurales en la temporada estival es muy diferente al del resto del año. «En verano es un turismo más familiar, mientras que el resto del año predominan los grupos de amigos», señala Parra.