Los rescates de menores accidentados en el Pirineo oscense se han disparado este verano. Solo en la última semana ya han sido auxiliados un total de 27 niños y jóvenes en Tella-Sin, Plan, Panticosa y Alquézar. Por suerte, todos los sucesos se quedaron solo en sustos ya que en ningún caso requirieron asistencia médica.

Los últimos en sumarse a esta lista fueron cuatro menores de entre 7 y 16 años que formaban parte de un grupo de dos familias residentes en Toledo y en Arganda del Rey (Madrid) que pretendían pasar una divertida jornada descendiendo el barranco del río Vero, en la Sierra de Guara, pero que al final vivieron horas de angustia hasta que fueron auxiliados.

Los responsables de este grupo de ocho personas avisaron a la Guardia Civil sobre las 21.30 del miércoles informándoles de que llevaban 7 horas de actividad y que se les había echado la noche encima en la zona Tercer Caos sin haber podido llegar al final del barranco. Los especialistas les recomendaron que no se movieran del lugar ya que no conocían el terreno y no disponían tampoco de linternas y les explicaron que iban a intentar llegar hasta ellos.

Ya en vehículo, los rescatadores recorrieron la zona haciendo señales con bengalas para tratar de localizarles. Las dos familias respondieron lanzando el flash de una cámara de fotos y los especialistas comprobaron que estaban muy por encima de dónde les habían indicado, en el Collado de San Justo. Y es que el grupo había decidido aventurarse a seguir caminando fuera del agua guiados por la luz que proyectaba la luna. Por ello, los agentes decidieron trasladarse hasta Alquézar para iniciar la aproximación al collado desde una senda que conocían y sobre la 01.30 les localizaron. Todos estaban ilesos y solo necesitaron hidratarse y descansar.

Fue una de las cinco operaciones de rescate que llevaron a cabo los especialistas de montaña de la Guardia Civil en menos de 24 horas y con un balance de 12 personas auxiliadas. El suceso más grave se produjo en Sahún, donde un montañero francés sufrió un traumatismo craneoencefálico y politraumatismos al despeñarse desde unos 30 metros.

Jacques Yves C., de 69 años, cayó por un cortado cerca de la cabaña de Llardaneta, en el Parque del Posets Maladeta. Hasta el lugar se desplazaron varios especialistas de Benasque, una patrulla del puesto de Seira, el helicóptero y un médico del 061, que estabilizaron al montañero. Una vez evacuado a Benasque, solicitaron el apoyo del helicóptero del 112, que lo trasladó finalmente al Hospital Miguel Servet de Zaragoza, donde quedó ingresado en observación, según fuentes de la DGA.

Tres rescates más

Fue el final de una jornada cargada de trabajo para los especialistas de montaña ya que de madrugada habían acabado las labores de rescate de otras dos personas. En una de las actuaciones, un joven de 30 años y vecino de Zamora, Víctor Manuel C. C., quedó enriscado mientras practicaba escalada en el Congosto de Olvena. Hasta el lugar acudieron especialistas de la Guardia Civil de Benasque, que tardaron casi 5 horas en llegar hasta el joven, que presentaba síntomas de agotamiento, y ayudarle a descender.

Sobre esa misma hora también finalizaron las tareas de auxilio de un montañero en el refugio de Estós, en Benasque. Según el testimonio del propio accidentado, estaba descendiendo la Tuca de Bardamina cuando se desprendió un bloque de roca al que estaba agarrado y se cayó varios metros. A consecuencia del accidente, sufrió heridas sangrantes en la cabeza. Pese a ello, decidió continuar su ruta hasta el refugio para ser atendido y evacuado ya que no llevaba teléfono móvil. Finalmente la Guardia Civil lo trasladó al centro de salud de Benasque.

También ayer, la Guardia Civil auxilió sobre las 17.00 a un barranquista francés de 51 años, Pascal S., después de sufrir un accidente en la zona del Estrecho de los Fornazos, en el barranco de la Peonera (Bierge). El guía que le acompañaba consiguió trasladarlo hasta la zona de Fuente Tamara después de que se hubiese golpeado contra una roca el tobillo izquierdo al saltar al agua. Hasta ese lugar se trasladó el helicóptero con varios especialistas en montaña y un enfermero del 061. Una vez localizado el herido, le inmovilizaron el tobillo lesionado y posteriormente lo trasladaron hasta el Hospital San Jorge de Huesca.

Por otra parte, los bomberos de Ribagorza Norte, la Guardia Civil y la Policía Local localizaron ayer a un niño de 8 años que se había extraviado en Benasque después de una discusión familiar. Además, los bomberos auxiliaron a un parapentista en Castejón de Sos que se quedó atrapado en un árbol en la maniobra de aterrizaje.