Los azulones debutan esta tarde en la fase de ascenso a segunda B en el campo municipal de Los Olmos (19.00), lo que supone para el equipo literano el regreso a los sitios de honor del fútbol aragonés. Es decir, al lugar que le corresponde, por historia y por afición.

Después del trágico descenso a los infiernos del fútbol regional, el Binéfar ha conseguido meterse entre los cinco primeros en el primer año de su regreso a tercera, lo que demuestra la capacidad de un club acostumbrado a territorios y objetivos notables dentro del fútbol nacional.

Enfrente, los hombres de Álex Monserrate se encontrarán con uno de los, probablemente, equipos más fuertes y con más posibilidades de conseguir el ascenso. Pero para subir solo vale ganar, a todos los rivales, y hacerlo frente a uno de los favoritos puede ser el mejor comienzo para una fase de ascenso.

El equipo gallego, que llega huyendo del papel de favorito, como hacen siempre los equipos que los son, tiene un potencial ofensivo realmente envidiable. Pero mañana sobre el césped de Los Olmos, y valga el tan manido tópico, serán once contra once los que disputen el partido, y ninguno tendrá diferencia en el marcador en el momento en el que el balón eche a rodar.

Monserrate, con una confianza absoluta en sus hombres, reconocía que el equipo estaba «bien, ilusionado ante el primer partido del playoff pero consciente de que enfrente tendremos un equipo muy complicado, pero eso también les motiva y es bueno». «Tenemos que jugar como el equipo fuerte que hemos sido durante toda la campaña. Pero teniendo muy en cuenta que es una eliminatoria y no un partido de liga, por lo que hay que tener mucha atención al equilibrio entre el ataque y la defensa. Esta claro hay que mentalizarse para hacer el partido perfecto y cometer los mínimos errores posibles, ya que cada vez que se acerque el rival lo hará con un potencial ofensivo muy grande», destacaba el entrenador.

Respecto al rival, reconocía que para el es «una incógnita saber como saldrá el Ferrol aquí en Binéfar, ya que la semana que viene tendremos el otro partido allí y supongo que para ellos el máximo objetivo será el de no encajar ningún gol. Nosotros trataremos de reforzar nuestros puntos más débiles y de potenciar y aprovecharnos de nuestras fortalezas al máximo».

Respecto al significado de este partido para el equipo, el club y la localidad: «Jugar esta eliminatoria es un poco como que Binéfar vuelva a estar en el panorama del fútbol aragonés. Eso ayuda a que la gente vuelva al campo, y también recibir un rival histórico como este» opinaba Monserrate, quien esperaba el apoyo de toda la afición literana, incluso de los clubes y localidades vecinas, al no haber hoy partidos de tercera. «Todos defendemos el mismo nombre», concluyó.

La única duda del técnico, que no se resolverá hasta última hora, será la presencia o no de Niche, que sufrió un fuerte golpe en el último partido de la liga regular.