El partido se presenta con un aire extraño al que no son ajenos los futbolistas del Huesca, que tratan de dejar a un lado el perfil victimista del Salamanca y pensar en las propias ambiciones. Así se desprende de las palabras de Tariq, que hoy volverá a ser titular salvo sorpresa de última hora. «Es un partido trampa, que la gente puede pensar que va a ser fácil, pero que yo pienso que va a ser de los más complicados», señala el delantero.

El conjunto charro necesita un punto de inflexión. Y lo necesita cuanto antes. Anclado en los 24 puntos, ha cambiado de entrenador en busca de esa reacción. «A ningún jugador le gusta perder tantos partidos seguidos. Además han cambiado de técnico. Los futbolistas le querrán agradar, aparte de darle una alegría a su afición de una vez por todas».

El dicho de a entrenador nuevo victoria segura es uno de los grandes topicazos de este deporte, que se recuerda cada vez que se cumple y se ignora cuando no se hace efectivo. «Nosotros tenemos que romper con ese dicho. Estamos supercapacitados para traernos los tres puntos. No pensamos siquiera en el empate».

La consigna de Onésimo a sus pupilos no ha podido ser más contumaz. «Lo tiene muy claro. Ha dicho que tenemos que salir a muerte y conseguir los tres puntos como sea y sobre todo después de la derrota de la semana pasada ante el Girona».

Tariq ya lleva tres semanas en Huesca. Los entrenamientos acumulados y el ritmo obtenido en los minutos de Liga en los que ha tomado parte ya (143) le hacen sentirse mucho más fuerte y capacitado para rendir mejor. «En comparación con cuando llegué, estoy más fino. Es normal, porque llevaba seis meses sin competir con regularidad. Por mucho que entrenase bien, es muy diferente la exigencia de los partidos».

Mejor físicamente

Ya en el último encuentro se vio a un Tariq más ágil, más metido, con mayor capacidad de maniobra para fajarse con los centrales e intentar darse la vuelta. "La intensidad de los entrenamientos que plantea el míster es espectacular y el ritmo al que trabajan los compañeros también. Todo eso se nota después en el terreno de juego. Yo espero que me ayude para poder aportar más al equipo».

Aunque lo más importante siempre es el triunfo colectivo, un delantero vive con el gol entre ceja y ceja. Tariq ya lo experimentó en Las Palmas, en la que fue su segunda aparición con la camiseta del Huesca.

«Ojalá que pueda marcar, no lo voy a negar, porque los puntas vivimos de los goles que hacemos, como se suele decir. Pero, si soy sincero, es verdad que me da igual quien marque siempre y cuando seamos capaces de traernos los tres puntos», concluyó Tariq, escasos minutos antes de subirse al autobús que llevó ayer a Salamanca a toda la expedición azulgrana.