TERCERA DIVISIÓN

Una liga todavía sin grandes favoritos

Los clubes altoaragoneses buscarán el día 6 definir su rumbo.

El Binéfar es el equipo mejor situado de los siete de la provincia oscense. Está a cuatro puntos del líder y no renuncia a nada.
Una liga todavía sin grandes favoritos
JAVIER BLASCO

El grupo aragonés de Tercera División está a punto de alcanzar su ecuador. Lo hará el próximo 6 de enero, jueves, día en que llegan los Reyes Magos y los conjuntos de la provincia definirán sus posiciones en el intermedio exacto de un devenir feliz para unos, apurado para otros, exigente para todos. Los siete conjuntos del Alto Aragón se agarran a sus opciones en la zona alta, media y baja de la clasificación con la esperanza de alcanzar sus respectivas metas. La pelota está en el aire.

Así, Binéfar, Sabiñánigo y Atlético de Monzón calibran sus aspiraciones a disputar el 'play off' de ascenso a Segunda B. Llevan todo el campeonato en la zona alta; en el caso de los celestes, en un buen tono que les permite soñar con todo. Los serrableses han entrado en un momento irregular y los mediocinqueños parecen haber hallado el camino en los dos últimos meses. El Binéfar de Álex Monserrate resiste los envites del Andorra, líder, y Ejea, segundo, seguramente los conjuntos más fuertes de la categoría. Han sido primeros y ahora ocupan el tercer cajón del podio con la moral intacta. Las recientes derrotas en los campos de Utebo y Giner Torrero han ralentizado su progresión, pero ahora se le presenta una doble oportunidad en casa: el día de Reyes recibe al Tarazona y el domingo 9 de enero, al Sabiñánigo.

Precisamente, los rojiblancos, que han acumulado dos puntos en los tres últimos duelos, han visto cómo Utebo y Zaragoza B les adelantaban por la izquierda. Ahora son sextos y figuran dentro de un grupo de favoritos que se puede limitar a ocho. Añádase a los citados a Calatayud y Monzón y probablemente saldrá de esta composición los cuatro clubes que luchen en junio por la categoría de bronce. Los de Koke Culebras cuentan con el aval de su fortaleza en casa y la solvencia sobradamente mostrada. Por detrás, los montisonenses se hallan a cinco puntos de los puestos de 'play off'. Nada está perdido, pero los de Miguel Rubio necesitan que varios rivales directos se descabalguen en la segunda vuelta, que el Atlético comienza ante uno de ellos, el Ejea, en el Isidro Calderón.

Quien no parece llamado a pujas de ningún tipo es el Barbastro, asentado con comodidad en la zona templada. Lejos de los puestos de descenso, y mirando de reojo los de ascenso, cumple con los designios que se otorgaron a un proyecto renovado al que le costó arrancar en el Municipal y últimamente ha convertido su casa en casi inexpugnable.

Las cosas se complican, más abajo, para Sariñena, Altorricón y Pomar. El grupo de sufridores, cada vez más deslavazado y con más distancias entre sus moradores, tiene a Mallén y Santa Isabel casi desahuciados. El Pomar, tercero por la cola, tiene la permanencia a tiro de seis puntos y con la necesidad imperiosa de sumar de tres en tres. Solo ha ganado tres choques y tiene dos salidas consecutivas a Tauste y Santa Isabel.

El Sariñena, que parecía bien situado, se ha complicado en los dos últimos meses. Al contrario que un Altorricón que pese a perder el último día con el Monzón tiene dos puntos más que los monegrinos y cuatro más que el Tauste, que abre los puestos de descenso a Preferente. Las cartas están sobre la mesa, y unos jugadores las tienen mejores que otros.