Blog - Tinta de Hemeroteca

por Mariano García

SUSANA OLIVÁN

"La participación ciudadana estaba anulada por el anterior alcalde"

Afirma que en los últimos once años se ha ignorado a los vecinos pero atisba un cambio.

Susana Oliván posa para esta entrevista en un rincón del casco.
"La participación ciudadana estaba anulada por el anterior alcalde"
J BLASCO

Susana Oliván es presidenta de la Asociación de Vecinos Osce Biella, el casco antiguo, y hace unas semanas ha sido elegida como máxima representante de la Federación Osca XXI, que aglutina a todos los barrios de Huesca.

El término se emplea de forma continúa en las asociaciones de vecinos y la administración. ¿Qué es la participación ciudadana?

Desde mi punto de vista es que el ciudadano, que es el que se va a beneficiar y el que va a pagar lo que se va a hacer en la ciudad, pueda tener opción a opinar y decidir sobre lo que se va a realizar porque eso determinará el futuro de la ciudad. Pero últimamente ha estado tan anulada que es difícil saber lo que es la participación ciudadana en Huesca.

Parece que la idea del ayuntamiento no coincide con la de los barrios...

Quien tiene la razón son los vecinos. El consejo ciudadano se convoca, según el reglamento anterior, un mes sí y uno no para proponer unos puntos del orden del día. Además de no convocarlo, cuando se ha hecho, se nos ha presentado un documento de algo que se ha hecho o se va a hacer y ya no tenemos derecho a réplica. En el plan Urban, cuando se solicitó a Europa la concesión de esos fondos era preceptivo las firmas de las asociaciones de vecinos de las zonas afectadas y entonces se nos pidió que firmáramos, pero después se han hecho tres reuniones informativas en las que no ha habido ni capacidad de decisión ni ha servido para anda. Son dos ejemplos de participación, en este caso, de falta de ella.

¿Eso es así solo en Huesca o es algo generalizado?

Ocurre principalmente en el Ayuntamiento de Huesca. Simplemente el cambio de alcalde ha supuesto un cambio de actitud hacia las asociaciones de vecinos y la Federación. Ahora se nos comunican las cosas, se nos enseñan los planos...Solo ha tenido que cambiar una persona para que el mismo equipo de gobierno haya dado un giro. Falta mucho, pero el cambio ha sido importante. El problema era en Huesca y, concretamente, de la persona que dirigía el ayuntamiento. En la asociación del Casco Viejo, olvidada y casi repudiada por el otro alcalde, vimos la nueva actitud desde el día que cambió el alcalde.

¿En qué se tiene concretar esa nueva actitud?

En que si se hace el reglamento de participación ciudadana, que se cumpla. La Federación ha estado trabajando para esto durante 10 años y al final, el ayuntamiento ha hecho el reglamento por su cuenta y ahora nos lo van a presentar. Es otro ejemplo de participación (con ironía) porque ahora se podrán hacer alegaciones, pero ya de base, se ha hecho sin nosotros. Y hace falta una participación también en los dos aspectos, porque nuestra participación se ve limitada por la falta de gente que tenemos en las asociaciones. Si en lugar de estar 15 en Federación, estuviéramos 30, podríamos estudiar las ordenanzas con detalle, asesorarnos...Creo que limitar la participación ciudadana por parte del ayuntamiento ha hecho que la gente se desanime.

Poca gente y la mayoría mujeres...

Hace diez años, cuando se creó la federación, prácticamente eran todo hombres. Pero ahora es al contrario. Es curioso. Tal vez sea que estamos ocupando nuestros puestos o que estamos más comprometidas...Creo que hoy la fuerza, el interés, el entusiasmo por conseguir algo es mayor en las mujeres que en los hombres

¿Cuál debe ser la función de una asociación de vecinos?

La principal tiene que ser transmitir el sentir del ciudadano, del vecino, a la administración. Tanto para bien como para mal. No debería de ser siempre, protestar, lo bueno sería que pudiera ser una colaboración, pero hasta ahora no se ha podido. Se trata de intentar solventar los problemas que tenemos los vecinos en una zona concreta de la ciudad. A veces, a la gente le cuesta subir a ayuntamiento para tramitar alguna cosa, sobre todo en mi barrio, que hay mucha gente mayor, y la asociación les es más cercana y les facilita ese trámite.

Es decir, para algo más que para organizar fiestas y chocolatadas.

¡Hombre!. Yo creo que eso es para lo que menos estamos. Está muy bien hacer fiestas porque sirven de cauce de comunicación con la gente del barrio, pero las asociaciones no están solo para eso y menos cuando nos recortan un 40% las subvenciones municipales, que aún no nos han pagado. No solo por el dinero sino por el trabajo que supone. Yo lo tengo muy claro y si un día hay que suspenderlas, vale más suspender las fiestas que otra cosa.

¿Frena el ayuntamiento la participación ciudadana por temor a que las asociaciones se conviertan en plataformas políticas?

Ninguno de los presidentes que hemos estado ha sido después concejal. En cierto modo, la inquietud que se tiene ahora como miembro de una asociación de vecinos es como política, no deja de ser lo mismo que hacen los partidos políticos. En un momento dado sí puede salir alguien hacia una lista, como de cualquier otro sitio, pero no es ni una mayoría, ni una cifra importante, ni una pretensión que se viva en el ambiente. Sé que alguna vez han comentado que nos los presidentes de los barrios nos creíamos más representativos del pueblo que los propios políticos. Aunque hay asociaciones que tiene detrás muchos más socios que votos tiene un concejal, no tiene nada que ver lo uno con lo otro, pero cada uno tiene su parte de responsabilidad. Hoy por hoy en las asociaciones de Huesca nadie se cree concejal.

¿Le han tentado de algún partido político para ir en las listas?

Sí.

¿Por qué ha aceptado presidir la Federación Osca XXI?

Llevo diez años en la federación. Fui fundadora y ocupo cargo en la junta desde entonces. Al proponérmelo, dije que sí, además tampoco había otra candidatura. Lo acepté porque llevo muchos años y creo en lo que estamos haciendo y que hay que seguir adelante. Ahora me ha tocado a mí y luego le tocará a otro. Es ocupar la cabeza visible porque en federación los que estamos, trabajamos mucho y en conjunto.

¿Cree que los oscenses se preocupan de Huesca?

Más que de la ciudad en general, está preocupados por lo que tienen en la puerta de casa. Eso es un problema importante porque si nos ocupáramos más de mirar con una visión global, funcionaríamos todos mejor. Tenemos casos en los que la gente está muy preocupada por el contenedor que molesta en su calle y cuando eso se soluciona, desaparecen. Se demuestra que estamos preocupados por lo que nos afecta más directamente, no por lo global y lo entiendo. Pero a veces te das cuenta de los intereses tan egoístas que hay, es necesario pensar con un aspecto más amplio para conseguir soluciones.

¿Cómo peatonalizar el paseo de Ramón y Cajal?

Eso mejor ni nombrarlo. Los vecinos que están ahí están contentísimos, pero ¿no sería mejor valorar si se tiene que empezar por ahí, o por los cosos, si se hace el paseo entero...? Lo mismo pasa con las peatonalizaciones. Si se hace un tramo, el que vive en esa calle la tiene peatonal, pero no se soluciona nada más. Creo que hay que mirar un poco más general de lo que se mira hoy en Huesca.

Además de industria ¿qué le hace falta a Huesca?

Tantas cosas...Hace falta un impulso, no se de que tipo, que reactive la ciudad. El comercio está muy decaído, el turismo tampoco está en el punto donde debiera por nuestro enclave...Tener una zona de ocio más definida que la que tenemos...Generar trabajo y movimiento sería importante porque a veces da la impresión de que Huesca es, ente comillas, una ciudad muerta. Siempre tenemos lo mismo, no evolucionamos mucho.