TRIBUNALES

Juzgan a una supuesta red de venta de cocaína que operaba en Huesca

El fiscal solicita 100 años de cárcel para trece personas. Entre los implicados figuran dos hermanos, su madre, un hermanastro y la novia de este.

Trece miembros de una supuesta red dedicada al tráfico de cocaína se enfrentarán el próximo lunes, en la Audiencia de Huesca, a penas que suman 100 años de cárcel y al pago de indemnizaciones por un total de 150.000 euros como presuntos responsables de un delito contra la salud público.


El escrito de acusación asegura que los acusados, de nacionalidad colombiana, llevaron a cabo su presunta actividad ilegal de distribución de drogas a partir de 2007 y hasta abril de 2008, "de común acuerdo y con ánimo de ilícito lucro".


Según el ministerio público, los cabecillas de la red eran los hermanos John Jairo y Alfonso N. C., quienes se encargaban, presuntamente, de adquirir la droga en Valencia y Madrid para su venta en bares y domicilios particulares de consumidores de la capital altoaragonesa.


Para llevar a cabo la distribución de la droga, los acusados se servían de su madre, que regentaba un bar en Huesca, de un hermanastro y de su compañera sentimental, de la gerente de un establecimiento de copas, del propietario de una vivienda en la avenida Martínez de Velasco y de la propietaria del turismo empleado para los viajes en los que era adquirida la droga.


La venta de la droga se realizaba a través de otras seis personas residentes tanto en la capital altoaragonesa como en otras poblaciones de Aragón y de Toledo.


La información obtenida por los agentes permitió la identificación de los principales cabecillas, en cuyos domicilios se localizaron distintas cantidades de cocaína preparada para su distribución, así como dinero en metálico.


El fiscal califica los hechos como un presunto delito de tráfico de sustancias que causan grave daño a la salud y solicita para los dos hermanos que supuestamente lideraban la red penas de 9 años de prisión, y de 7 años y 6 meses para el resto de los miembros de la banda.


A todos les pide el pago de multas de 11.595 euros, con la imputación de otros seis meses de prisión para cada uno en caso de no hacer efectivo su abono.