CRIMEN DE SABIÑÁNIGO

La Guardia Civil coteja el ADN del detenido con pruebas halladas en el piso del asesinato

La anciana conocía al presunto autor ya que durante varios años ambos vivieron en el mismo edificio de Sabiñánigo.

La víctima y el detenido vivieron en el mismo edificio -de cuatro plantas y de color gris- varios años.
La Guardia Civil coteja el ADN del detenido con pruebas halladas en el piso del asesinato
J. BLASCO

La Guardia Civil ha enviado a su laboratorio muestras de ADN del hombre detenido el martes en Zaragoza, C. M. L., de 38 años, como presunto autor del asesinato de una anciana de Sabiñánigo para cotejarlas con los restos que los investigadores del caso encontraron el pasado mes de agosto en el domicilio de Teresa L. A., de 74 años, que fue hallada muerta y amordazada con una toalla bajo de la cama de una de las habitaciones de la vivienda.


A la espera del resultado que arroje el testimonio del detenido, que ayer permanecía en el cuartel de Jaca a la espera de declarar ante la Policía Judicial -dispone de 72 horas de plazo antes de ponerlo a disposición judicial-, esta prueba biológica podría ser determinante para tratar de situarle en el interior del piso donde ocurrieron los hechos y de los que no se han encontrado testigos.


La Guardia Civil sigue manteniendo un secretismo absoluto en torno a las investigaciones y la Subdelegación del Gobierno en Huesca se limitó ayer a confirmar la detención de una persona como presunta autora del crimen.


No obstante, a medida que avanzan las horas se van conociendo más datos sobre el detenido, aparte de que sea vecino de Sabiñánigo y de que tenga antecedentes por delincuencia común y drogas. Como ya apuntaban en agosto las investigaciones de la Guardia Civil, se trata de una persona a la que la víctima conocía muy bien, de allí, quizá, que la puerta del piso no estuviera forzada ni cerrada por dentro ya que la mujer pudo facilitarle la entrada.


Fue desahuciado por deudas

Fuentes consultadas indicaron que C. M. L. conocía a la anciana desde hacía años ya que en su día estuvo viviendo con su familia en un piso del mismo edificio donde ocurrió el crimen. Después de que los padres del sospechoso se trasladaran a una residencia, se quedaron viviendo en el domicilio el detenido y uno de sus hermanos, pero hace unos años fueron desahuciados por deudas. De hecho, la relación entre la anciana y el sospechoso parecía ser buena ya que en alguna ocasión ella le había prestado o dado dinero.


La Guardia Civil enseguida centró la investigación en este hombre, que ya fue visto deambulando por Jaca a finales de agosto. En estos últimos tres meses, han ido 'pisándole los talones' hasta que la semana pasada tuvieron conocimiento de que estaba en Zaragoza y de que podría estar frecuentando comedores sociales.


Por ello, agentes de la Policía Judicial se desplazaron a la capital aragonesa para pedir la colaboración de la Policía Local y Nacional. Además, le dieron fotografías suyas por si lo identificaban en alguno de los servicios de beneficencia, a los que los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad suelen acudir con regularidad dentro de sus labores de vigilancia.


El martes, la Policía Local le localizó cuando se disponía a entrar en el comedor social de la parroquia de Nuestra Señora del Carmen, uno de los más frecuentados por los indigentes que residen en Zaragoza. Desde la parroquia aseguraron ayer que el arresto se produjo en la calle y no pudieron aclarar si el detenido llevaba mucho tiempo acudiendo al centro.


"Tranquilizará a la familia"

Por otra parte, el alcalde de Sabiñánigo, Jesús Lasierra, recibió a primera hora de la mañana una llamada del subdelegado del Gobierno en Huesca, Ramón Zapatero, informándole simplemente de la detención de una persona por su presunta relación con el crimen de la anciana ya que también le recalcó que por ahora no conocía más detalles al estar el caso bajo secreto de sumario.


Lasierra mostró su "alivio y satisfacción" por la noticia de la detención "y porque también ayudará a tranquilizar a los familiares de la víctima y a los habitantes de Sabiñánigo después del hecho tan doloroso que sufrió una de nuestras vecinas". No obstante, también se mostró prudente para dejar que la investigación de la Guardia Civil y de la Justicia "siga su curso".