PIRINEOS

Aragón ha aprobado en ocho años 404 proyectos de cooperación con Francia

Políticos y técnicos analizan el futuro de las acciones comunes.

La jornada congregó a técnicos y responsables públicos de los dos países.
Aragón ha aprobado en ocho años 404 proyectos de cooperación con Francia
RAFAEL GOBANTES

La barrera física de los Pirineos y las malas comunicaciones transfronterizas no han sido obstáculo para que entidades públicas y agentes económicos y sociales de uno y otro lado hayan trabajado juntos desde que Europa eliminó las fronteras interiores. En los últimos ocho años, el Gobierno de Aragón y los Consejos Regionales de Aquitania y Midi-Pyrénées han desarrollado 404 proyectos en el marco de convenios de cooperación, implicando a 160 entidades. El futuro de esta colaboración se analizó ayer en una jornada celebrada en el Palacio de Congresos de Huesca, a la que asistieron un centenar de técnicos y responsables públicos.


El número de proyectos ha ido creciendo: de los 47 presentados en 2004 se ha pasado este año a 77. Los hay promovidos por universidades, centros educativos, empresas, corporaciones locales, ONG... y normalmente están cofinanciados por la UE y las administraciones regionales.


El director general de Acción Exterior de la DGA, Pedro Salas, dijo que Aragón ha sido "muy activo" en lo que llamó "cooperación transfronteriza de proximidad", y abogó por dar un salto cualitativo. "Lo que se ha hecho hasta ahora tiene una visibilidad institucional, no hay una visibilidad social. Estamos lejos de que los ciudadanos sepan que hay iniciativas en las que participan que son parte de un proyecto de cooperación".


François Maïtia, representante de Aquitania, recordó que "los proyectos que apoyamos salen de la sociedad: de las asociaciones, los municipios, las cámaras de comercio, entidades culturales...", y pidió más apoyo financiero de la UE, aunque el representante de la Comisión Europea, José Antonio Ruiz de Casas, advirtió de que con la ampliación hay menos fondos.


Para Maïtia, es necesario hacer un mayor esfuerzo en las comunicaciones, sobre todo por parte de Francia, y "cuanto más cooperemos más necesitaremos esas infraestructuras". Su colega de Midi-Pyrénées, Marc Carballido, admitió que el compromiso de su país en permeabilizar la frontera es "insuficiente" y animó a las fuerzas locales a continuar los intercambios "porque más razones tendremos para desbloquear el problema de las infraestructuras".


La jornada incluyó talleres de iniciativas sociales, educativas y culturales, de universidad e investigación, actividades económicas e incluso cine. Allí estaban, por ejemplo, Cari Arlegui, directora del instituto de Sariñena, y la profesora Susan Beisso, de un centro del Pays Tolosan, que colaboran en un intercambio para incentivar a jóvenes emprendedores. Y Víctor López, de la empresa Sargantana, que ha trabajado en proyectos con el valle de Aspe, uno relacionado con el colegio de Canfranc -el primer centro rural bilingüe de Aragón-, y otro con la Célula Agroalimentaria Pirenaica para comercializar productos. Javier Abadías, de la Asociación de Desarrollo de la Hoya, valoraba que con estas ayudas se construyeron los centros de aves de Riglos y Santa Cilia de Panzano.