JUICIO

La plantilla del centro de salud de Barbastro denuncia la agresión a un celador

Una veintena de trabajadores arroparon ayer a su compañero en el juicio por las patadas que le propinó el padre de un paciente.

Los trabajadores del centro de salud, ayer ante los juzgados.
La plantilla del centro de salud de Barbastro denuncia la agresión a un celador
J. L. PANO

 Alrededor de veinte empleados del personal sanitario del centro ambulatorio de Salud de Barbastro se concentraron ayer a las puertas del Juzgado de la ciudad del Vero para solidarizarse con un compañero que sufrió las agresiones de un paciente este verano y reclamar mayores medidas de seguridad en su lugar de trabajo. La asistencia a esta concentración fue masiva ya que todos los trabajadores, salvo los que debían cumplir los servicios mínimos, arroparon a su compañero.


La concentración coincidió con el inicio del juicio al presunto autor de las agresiones, un vecino de Barbastro. El personal sanitario acompañó a su compañero, un celador, hasta las dependencias judiciales. Y mientras se desarrolló la vista judicial el personal sanitario se apostó a las puertas del Juzgado mostrando una pancarta que rezaba 'Trabajamos por ti. No nos agredas, dialoga. Centro de Salud Barbastro'.


Los hechos ocurrieron el pasado 31 de julio. Según explicó el doctor Juan Vidaller, que ejerció de portavoz del Centro de Salud de Barbastro, el paciente telefoneó al ambulatorio para solicitar una visita médica de urgencia para atender a su hijo, que estaba vomitando. El celador le comunicó que debería acudir al centro de salud con su hijo para que el médico de guardia realizara una mejor atención. A los pocos minutos, según relató el portavoz del centro de salud, el presunto agresor entró en el mostrador y comenzó a atacar al celador propinándole patadas.


Traumatismos en un hombro

En el momento de la agresión el centro de salud alertó a los policías municipales y la agresión no fue a más. Sin embargo dicha agresión le ha causado al celador varios traumatismos leves en un hombro a consecuencia de los cuales todavía sigue de baja y debe de realizar rehabilitación. A eso hay que añadir el trauma psíquico que le ha quedado, apuntó el doctor Vidaller.


Los hechos fueron denunciados ante el servicio de Salud, que inició el protocolo de prevención de riesgos y presentó las correspondientes denuncias, ofreciendo asesoramiento al celador agredido. Además el gerente del Sector Barbastro trasladó su apoyo al centro de salud.


"Estamos aquí para apoyar a un compañero agredido por un paciente que utilizó otros mecanismos que no tiene que utilizar, la violencia. Es una agresión y debe tener su repercusión porque estamos expuestos todos los días del año a que los fallos del sistema repercutan directamente sobre nosotros. Le apoyamos y seguiremos apoyándole porque mañana podemos ser cualquiera de nosotros", afirmó el portavoz.


Vidaller matizó que, afortunadamente, se trata de "hechos aislados" y también dijo que en conversaciones con algún familiar del presunto agresor este había mostrado arrepentimiento. "Pero el arrepentimiento vino después y en lugar de coger un libro de reclamaciones reclamó sobre el cuerpo del celador. La visita de un paciente a domicilio es una decisión que debe tomar el facultativo según los datos que tenga. El portavoz espera que la sentencia "sea similar a otras en las que se ha considerado que el funcionario que hace su trabajo es una autoridad, como si se tratará de un policía".