La necesidad de cambiar de vivienda, para buscar una más barata, o la imposibilidad de seguir asumiendo la hipoteca de un piso en propiedad han provocado que en los últimos meses hayan aumentado las peticiones para conseguir una ayuda de urgencia para el pago del alquiler, que presta el Ayuntamiento de Huesca a través de la Fundación Municipal de Servicios Sociales.

Hasta ahora, la mayoría de las ayudas de emergencia iban destinadas a sufragar alimentos o prótesis (unas gafas), pero según la responsable de la Fundación, la concejala Flor Ardanuy, se ha producido un incremento cualitativo y cuantitativo en el pago de alquileres. "Hay gente que tiene que dejar su vivienda habitual, porque la ha perdido al no poder afrontar la hipoteca, o porque busca un alquiler más barato", explicó.

Las prestaciones de urgencia son pagos únicos y extraordinario destinados a resolver situaciones puntuales. Nunca se entregan directamente a los beneficiarios: si se trata de un alquiler, se paga al casero; si es para alimentos, se entrega un vale para canjear por comida en el supermercado.

La Fundación Municipal de Servicios Sociales dispone este año de 110.000 euros para este tipo de ayudas y, de momento, se han gastado la mitad, aunque en los últimos ejercicios económicos siempre es necesario suplementarlo. En 2009, la cifra pasó de 75.000 a 85.000 euros, pero a finales de ese año fue necesario echar mano de dos partidas extraordinarias de 8.500 y 14.000 euros. Cuando se fija el presupuesto municipal del año siguiente se tienen en cuenta estas cantidades añadidas para aumentar la partida, aunque casi siempre se sigue quedando corta.

Un pago único

Flor Ardanuy asegura que las ayudas de alquiler para evitar un desahucio no solo representan un mayor porcentaje del global sino que elevan la cuantía. Y es que un pago para un alquiler puede equivaler a tres veces lo que se da para alimentación (100 0 150 euros). "Lo damos una sola vez, porque la finalidad es desbloquear una situación social o económica de emergencia buscando un cambio positivo, y nunca lo entregamos al beneficiario sino al propietario de la casa", aclaró la presidenta de la Fundación Municipal de Servicios Sociales. Ardanuy no pudo concretar el número de casos porque no se desglosan hasta que no se elabora la memoria anual.

La crisis y el aumento del desempleo han hecho que cada día se tengan que atender más emergencias de este tipo. En la ciudad de Huesca había registrados en el mes de julio 3.453 desempleados. La situación se agravará cuando a esta lista se incorporen los 200 trabajadores de Luna Equipos Industriales.

El alcalde, Luis Felipe, les ofreció los recursos sociales del Ayuntamiento de Huesca, a los que ya ha acudido algún trabajador. Y es que estos empleados ni cobran salario de la empresa, que aún les debe dinero del 2009, ni el paro. Ni siquiera tienen libertad para buscar otro trabajo, ya que siguen ligados contractualmente a la empresa hasta que se resuelva el expediente de extinción de contratos.