El primer apartadero ferroviario de Huesca, en construcción en el polígono de La Armentera de Monzón por el grupo aragonés Samca, entrará en servicio en octubre. Así lo aseguraron los responsables de la compañía, propietaria de Brilén y Novapet en Barbastro, durante la presentación del proyecto al consejero de Obras Públicas del Gobierno de Aragón, Alfonso Vicente. La cercanía con la estación de Selgua, la conexión a la N-240 y la autovía Huesca-Lérida, la urbanización del polígono de La Armentera y la proximidad con Francia fueron las claves que llevaron al grupo a asentarse en Monzón.

La intermodal tiene una inversión de 10 millones de euros, de los cuales en esta primera fase ya se han invertido 9. Las obras se iniciaron el 15 de marzo con un plazo de ejecución de siete meses.

El proyecto se desarrollará en cuatro fases sobre 150.000 m2. En la primera se están construyendo dos vías de 520 m. de longitud y 62 m. de ancho. En las sucesivas se construirá una grúa de carga y descarga, se ampliará el muelle de carga y se crearán dos nuevas vías de 750 por 90 metros.

Samca generará un movimiento de doce a catorce trenes por semana, lo que supondrá más de 200.000 toneladas de entrada y salida. Así mismo se suprimirán 100 desplazamientos diarios de los camiones que actualmente salen de su fábrica de Barbastro. Esto supondrá además de un ahorro económico, una reducción de gases contaminantes a la atmósfera.

El grupo Samca creará cuatro empleos directos para gestionar este apartadero, que se espera sirva de motor de atracción para implantar nuevas empresas en la zona y consolidar las existentes.

La sociedad Terminal Intermodal Monzón S.L., integrada por el grupo Samca, contará con nuevos socios de las autoridades portuarias del Cantábrico o del Mediterráneo y de Renfe Operadora.