"Después de lo que pasó en Jánovas, por fin nos ponemos a trabajar en lo que vendrá". El alcalde de Fiscal, Manuel Larrosa, expresó ayer su alegría por el comienzo inminente de los planes especiales de trabajo para la reconstrucción de las poblaciones deshabitadas de Jánovas, por un lado, y de Lavelilla y Lacort, por otro.

El equipo de arquitectos Cerouno, con Pablo de la Cal al frente, se hará cargo del primero, y otro grupo, representado por Gerardo Molpeceres, del segundo, tras pasar ambos el concurso municipal. Los proyectos, que costarán 100.000 euros a cuenta de la Dirección General de Urbanismo de la DGA, estarán terminados a finales de diciembre de este año y, a partir de entonces, en 2011, se pondrán en marcha los trámites administrativos.

"Es el inicio de un trabajo de todos y nos gustaría que fuera consensuado entre la comarca, las instituciones y los antiguos vecinos", dijo el edil en alusión a los afectados por la expropiación de los terrenos en los años 60 por la construcción de un pantano, que fue descartado en 2005. "Tenemos ilusión por empezar y queremos que sea lo antes posible", adujo el edil durante la presentación a los medios de comunicación, que tuvo lugar en el deshabitado Jánovas y en la que estuvo acompañado por los arquitectos responsables de ambos proyectos, el abogado municipal José Luis Bartolomé, y Antonio Escalona y José Manuel Salamero,alcaldes de Bielsa y Boltaña, respectivamente.

Estos planes, según apuntó el primer edil, irán acompañados en el futuro por las reversiones de las propiedades y del Plan de restitución territorial que ordena la Ley del Plan Hidrológico Nacional, que permitirán la vuelta de los antiguos vecinos. "Nosotros pensamos en darles la licencia de obra para que puedan regresar, pero debe haber un esfuerzo conjunto de todas las administraciones implicadas", añadió Larrosa.

Dos equipos multidisciplinares serán los que se encarguen de la elaboración de sendos planes. "Creemos que es importante que haya todo tipo de profesionales: arquitectos, abogados, ingenieros y geógrafos para que se vea el plan desde todas las visiones posibles", informó José Luis Bartolomé, el abogado del Ayuntamiento de Fiscal, quien recordó que el Consistorio tiene la responsabilidad de elaborar el proyecto, pero, dijo, "hay otras instituciones que tienen otras responsabilidades, como la reversión".

Reto "apasionante"

Los arquitectos elegidos para desarrollar en el papel las poblaciones apuestan por la conservación a la par que una visión actual. Es el caso de Molpeceres, que redactará el proyecto de Lavelilla y Lacort, y confesó estar inmerso "en un reto muy apasionante desde el punto de vista técnico, pero que sentimos como propio". El experto informó de que ya han comenzado los contactos con los antiguos habitantes de la zona, y aseguró que su espíritu es "de conservación" pero indicó que "la mirada está puesta en el futuro para hacer que lo que supuso un perjuicio en el pasado sea una oportunidad". El objetivo, convertir la zona en un lugar moderno y bonito, sin perder el respeto a las ruinas y a la historia.

Por su parte, Pablo de la Cal, del equipo de Cerouno, apuntó que el trabajo físico es bastante parecido al de otros núcleos destruidos, pero tiene como singularidad a unos vecinos afectados por la expropiación que se imaginan cómo va a ser el pueblo. "Tenemos el deber de canalizar el imaginario colectivo y garantizar a la población los usos y las necesidades actuales", destacó De la Cal, quien confirmó que tendrán mucho cuidado con el tratamiento paisajístico, ya que "se trata de un entorno inalterado, en el que no hay cables, ni carreteras, ni canales".

Asimismo, enfatizó la importancia de que el municipio de Fiscal "se convierta en núcleo de nuevas actividades y sea motor de desarrollo para la comarca". Algo a lo que el alcalde añadió que "habrá que cuidar que sea bonito".

El proceso de participación vecinal ya está en marcha y, aparte de las reuniones informativas, está previsto que se organicen unas jornadas sobre urbanismo en Jánovas, organizadas conjuntamente por Fiscal y el Gobierno de Aragón, para mostrar la labor que se va a hacer en dicha población.