Nolasco firma por dos temporadas

Confirmado. Francisco Nolasco es el nuevo entrenador del Obearagón Huesca._El hasta ahora técnico del Almoradí se hace con el banquillo que deja Txema Senosiain y será el responsable de meter al equipo en la fase de ascenso a la Asobal en la próxima campaña. Ha firmado por dos temporadas.

Técnico del Patronato Municipal de Deportes del Ayuntamiento de Elche, nacido en noviembre de 1969, decidió asumir el banquillo altoaragonés tras hablarlo con su familia, con su club y con los responsables de la concejalía. Viene a Huesca, porque “la propuesta deportiva me parece atractiva. Huesca tiene y ha tenido en los últimos años plantillas para aspirar a lo más alto de la clasificación, por lo que optar a terminar entre los cinco primeros no es una ambición, sino una realidad”, asegura. Sabe que el objetivo no será fácil._Calcula que unos 8 ó 9 equipos partirán con esa intención de entrar entre los cinco primeros al acabar la liga regular. La propuesta de juego es de “balonmano rápido, defensas un poquito más abiertas. Es lo que he hecho hasta ahora y creo que ahora, con las posibilidades del Obearagón Huesca, se puede acentuar”. Francisco Nolasco asegura que no llegará a Huesca con jugadores bajo el brazo. Reconoce que todo entrenador tiene su lista particular, pero su ficha o no siempre depende de una serie de condicionantes. Respecto al actual equipo indicó que ahora se van a poner manos a la obra en la política de renovaciones._El equipo, tan solo tiene contrato en vigor Álex Álvarez y el extremo Marco Escribano. Eso sí, también se ha abierto contactos con otros jugadores ya que la propia directiva espera mantener el núcleo duro del equipo donde tienen nombre propio Jorge Gómez, Agustín Vidal y Raúl Bartolomé.

Todo indica que contará con_Efrén Pérez como segundo. El ilicitano señala que le gusta su forma de trabajar y su vinculación con la cantera._Huesca la conoce como ciudad de paso en dirección al Pirineo y Jaca, localidad a la que ha ido muchas veces, confiesa el técnico del Obearagón.

Ignacio Viscasillas