MANUEL RODRÍGUEZ CHESA

"Los recortes deben llegar a los consejos de dirección y asesores"

El presidente de la Cámara de Comercio de Huesca y del Consejo Aragonés de Cámaras de Comercio opina que las medidas de ajuste son insuficientes. "Ahora hay que aclarar la posición de los bancos", dice.

Rodríguez Chesa, en las escaleras de la Cámara de Huesca.
"Los recortes deben llegar a los consejos de dirección y asesores"
R. GOBANTES

Manuel Rodríguez Chesa preside desde 2009 el Consejo Aragonés de Cámaras de Comercio e Industria, y desde 2007 la Cámara de Huesca, cargo en el que fue confirmado en abril. Con 64 años, este empresario de fontanería y ex alcalde de Barbastro dirige los destinos de una organización de afiliación obligatoria que agrupa en la provincia a unas 25.000 personas y empresas, desde una pequeña tienda de barrio a una gran industria.

Se acaba de reunir con el presidente Iglesias para hablar de las medidas de ajuste y usted ya ha manifestado que son insuficientes. ¿Qué más hay que hacer?

El mercado laboral se tiene que revisar, y hemos de aclarar cuál es la posición de las entidades financieras, qué van a hacer para agilizar los créditos.

O sea, tras los funcionarios y los pensionistas, ahora es el turno de los banqueros.

Creo que sí, las empresas y las familias ya llevan tiempo sufriendo la crisis muy seriamente. La rebaja salarial a los funcionarios va a reducir el déficit, pero no va a mover la economía. Tendremos que plantearnos que todos estamos en el mismo saco. Por algún sitio hay que empezar, pero tiene que haber nuevas medidas: habrá que plantearse la reestructuración de la administración, los grandes consejos de dirección y los grandes equipos de asesores. Cuando el ciudadano de a pie conoce esos contratos blindados y esos sueldos exagerados, no lo entiende, eso genera inquietud.

Para las cámaras, la confianza es muy importante. ¿Cree que algunas de las medidas del ajuste no contribuyen a generarla?

Los movimientos incompletos generan inquietud, y el desequilibrio viene más por la intranquilidad que por la pura realidad. Desde la Cámara de Huesca, desde el Consejo Regional y desde el Nacional decimos hace tiempo que e falta confianza. Si todos estamos dispuestos a ajustar nuestras situaciones familiares y empresariales, saldremos adelante.

Como presidente del Consejo Aragonés de Cámaras, ¿podría decirnos si la economía aragonesa goza de mejor salud que la española?

Dicen que estamos un poquito mejor, pero la situación es mala.

¿Piensa que las instituciones de Aragón y las de Huesca han sabido estar a la altura de las circunstancias?

Siempre se puede hacer más, pero es cierto que han planteado medidas con los agentes sociales: esfuerzo por atraer empresas, convenios con entidades bancarias? En mi opinión, lo fundamental es que hubiera un cambio de mentalidad. Sería más efectivo que las instituciones pagaran lo que deben a las empresas, se ahorrarían dinero del subsidio de paro porque los empresarios podrían generar empleo y riqueza.

La Cámara de Huesca siempre ha estado detrás de las reivindicaciones para mejorar las comunicaciones. En su día encargó estudios sobre el impacto de la autovía Lérida-Huesca-Pamplona en las comarcas, pero la apertura de los primeros tramos ha coincidido con la crisis y los efectos no se han notado aún.

La autovía es un bien necesario, y en este momento está muy adelantada. Todos desearíamos que fuera más rápido, pero hay que tener conciencia de lo que cuesta hacer estas obras. Cuando esté acabada puede generar un cambio en el reparto de la riqueza. Si esta autovía hubiera estado hecha hace 15 años, parte de los corredores industriales de Barcelona los tendríamos aquí, por ejemplo en la zona Binéfar-Monzón-Barbastro. Ahora solo hay tres tramos abiertos y no se nota, ni siquiera en el tiempo de viaje, pero cuando se acaben las obras podremos hablar de un antes y un después.

Donde no se avanza ni a tiros es en mejorar las comunicaciones con Francia.

El famoso E-16 es un tema enquistado. Solo se ha adelantado en que es uno de los 30 prioritarios de la Unión Europea. Es una obra absolutamente necesaria, y lo digo pensando no solo en Huesca o en Aragón sino en el norte de África, España y Portugal. Seguiremos luchando porque ese corredor pase por el Pirineo central. Estamos contactando con todas las comunidades afectadas a lo largo del recorrido para reivindicar conjuntamente la ejecución del E-16.

La Cámara luchó durante muchos años por el túnel de Somport. ¿Qué siente cuando después de atravesar 8 kilómetros de una gran obra de ingeniería se encuentra en el lado francés con carreteras tercermundistas?

Que somos europeos de tercera división. Eso desalienta, pero necesitamos energía para seguir luchando. Volviendo a la autovía Lérida-Huesca-Pamplona, si cuando se acabe no hay una salida directa a Europa, habrá sido un atraso.

La Cámara se implicó en la dinamización del aeropuerto de Huesca y, a través de su fundación, Fundesa, participó en el accionariado de Pyrenair. Al poco tiempo vendió su paquete accionarial. ¿Fue una marcha atrás?

La Cámara tiene el propósito de ser dinamizador de actividad, no una gestora. Entendimos que una vez arrancada la empresa y habiendo unos socios privados dispuestos a asumir la participación de Fundesa, nos debíamos retirar. Seguimos estando como Cámara con una participación simbólica. No hemos abandonado el barco.

Han pasado 3 años desde la inauguración del aeropuerto y solo hemos visto operar a una compañía unos pocos meses al año. ¿Esperaban más de este aeropuerto? ¿Cree que la apertura del de Lérida le puede perjudicar?

El tráfico aeroportuario es complicadísimo, algunos aeropuertos solo están vivos por los vuelos de bajo coste. ¿Operar más empresas en este aeropuerto? Pues es que en esta provincia somos los que somos. Es muy difícil que haya un movimiento como para atraer vuelos regulares. En cuanto al de Lérida, no hay que tener miedo a la competencia bien entendida, y todo el mundo tiene derecho a tener unos servicios. Si las cosas funcionan, tiene que haber clientes de invierno para los dos.

¿Vistos los resultados, valía la pena invertir en un aeropuerto?

Es un tema pasado y, como no tiene solución, no sé si es procedente opinar. Ahí está, es un servicio más y hay que darle uso. Lo que no tiene solución, mejor no darle vueltas.