La Federación de la Construcción advierte de que puede haber más suspensiones de pagos

La Federación de Asociaciones de la Construcción de la Huesca advirtió ayer de que el concurso de acreedores solicitado por Marino López XXI quizá no sea un caso aislado y que puede haber más suspensiones de pagos por problemas de financiación en otras empresas. El gerente de la Federación, Manuel Torres, declaró, sin entrar a valorar el caso concreto, “que pertenece al ámbito de su dirección”, que este tipo de situaciones puede repetirse, “aunque estemos hablando de empresas solventes, con vocación de continuar su actividad y de acabar las obras”, ya que, a su juicio, la razón es “exógena, se ven abocados a eso por la restricción en el crédito”.

Marino López XXI es la primera gran constructora de Huesca que ha solicitado un concurso de acreedores. La petición la formuló el pasado lunes y ayer el juzgado le requirió una ampliación de la documentación.

Manuel Torres recordó que tiene “una trayectoria consolidada”. Su actual situación, dijo, puede obedecer a la necesidad de hacer frente a unas líneas de crédito porque el mercado de la vivienda está parado. Las empresas, añadió, tiene dificultades para refinanciarse, aunque tengan patrimonio, porque sus activos (el suelo) han perdido valor. En este sentido, pidió flexibilidad a las entidades bancarias. “Necesitamos que la liquidez llegue a las empresas y que la refinanciación no se haga para tres meses, porque en ese tiempo el problema no estará solucionado”.

La otra cara de la moneda la ofreció la secretaria provincial de CC. OO. al criticar a los que “se han enriquecido y ahora suspenden pagos por falta de liquidez, porque han desviado ese patrimonio a otras empresas”. “Ya me gustaría a mí hacer una suspensión de pagos con el dinero que tienen él (Marino López) y otros empresarios de la construcción”, declaró Arancha García-Carpintero, que pidió a los poderes públicos que estén vigilantes a la hora de valorar los expedientes de regulación de empleo y los concurso de acreedores.

El alcalde de Huesca, Fernando Elboj, calificó la noticia de “inquietante en sí misma”, aunque se mostró prudente porque “hay que conocer a fondo los términos de esta suspensión”.

El concurso de acreedores afecta a entre 80 y 90 clientes con contratos firmados y pisos por entregar, aunque la empresa ha garantizado que las acabará. La mayoría de las promociones están concluidas, como la urbanización Jardines de Montearagón, en Tierz, y el edificio Albéniz, en la avenida de Monegros. En la misma calle está el edificio Auditorium, todavía en construcción, donde ayer seguían las obras.