HUESCA

Un tren de pasajeros descarrila en Anzánigo y corta la vía del Canfranc casi un día entero

Resultaron ilesos los seis viajeros del convoy que cubría el trayecto de Zaragoza-Jaca a baja velocidad.

Un tren de pasajeros que cubría el trayecto entre Zaragoza y Jaca descarriló ayer al mediodía a la entrada de la estación de Anzánigo con seis viajeros a bordo que resultaron ilesos y tuvieron que finalizar su viaje en taxi. El accidente provocó el corte de la línea de Canfranc durante el resto de la jornada. Además, se tuvieron que suprimir los otros tres servicios que tenían que circular ayer. Adif (Administrador de Infraestructuras ferroviarias) informó a última hora de que el servicio se reanudaría hoy a las 6.50 con la salida del primer tren de Canfranc.


Aunque hacía meses que no se habían producido incidencias, en el verano de 2007 hubo seis averías en dos meses, en una línea para la que distintos colectivos reclaman su reforma inmediata.


El primer eje del coche motor se salió del rail a las 12.46 por causas que todavía se desconocen, según informó Renfe. Esto provocó que el maquinista tuviera que dar un frenazo para detener la máquina por completo. No obstante, al tratarse de una línea convencional y de una zona con una orografía complicada, el tren no circulaba a gran velocidad. Según fuentes ferroviarias, no supera los 60 o 65 kilómetros por hora en este tramo.


La máquina se encarrilló de nuevo a las 19.00 y a las 19.20 se remolcó hasta la estación de Ayerbe, según informó Adif. No obstante, los trabajos para reparar y comprobar el estado de la vía se prolongaron hasta las 22.00. De todos modos, las causa todavía no está clara y tanto Renfe como Adif apuntaron ayer que se ha abierto una investigación.


Los viajeros llegaron a su destino con una hora y media de retraso. Por fortuna, el accidente de produjo en el kilómetro 59,200, a solo 200 metros de la estación de Anzánigo, por lo que no hubo dificultades para hacer el trasbordo de los pasajeros. La compañía Renfe Operadora, responsable del servicio, envió un taxi de ocho plazas para que los pasajeros pudieran finalizar el viaje. Después, de pasar casi una hora y media de espera dentro del tren, a las 14.17 los recogió el servicio público. El taxi pudo parar en el camino paralelo a la vía, que da acceso a la vieja estación cerrada desde hace años, y los afectados apenas tuvieron que andar en un momento en el que caía aguanieve.


El tren, un diésel TRD compuesto por dos coches motores, salió de Zaragoza a las 10.26 con cuatro pasajeros y cogió a los otros dos en Huesca, después de parar en Tardienta. Unos veinte minutos después de pasar por Ayerbe llegaba a la estación de Anzánigo, donde no tenía parada. Cinco de los seis viajeros continuaron su viaje en el taxi hasta Sabiñánigo y otra joven hasta Jaca.


El resto de los trenes que tenían que circular ayer por la vía fueron suprimidos porque todavía no se había podido retirar el convoy averiado de la vía férrea. Se suprimió el tren regional que sale de Zaragoza a las 15.13 y va hasta Canfranc. Además, tampoco pudo salir el TRD a las 15.35 desde Jaca a Zaragoza, puesto que ese trayecto se tiene que hacer con la misma máquina que se averió a la ida.


El último tren de pasajeros que debía circular por la vía es otro regional con salida desde Canfranc a las 17.55 y llegada a Zaragoza a las 21.42. Como a la hora de la salida el servicio no estaba restablecido, también se suprimió y los viajeros llegaron a sus destinos con taxis. Según explicó Renfe, en otro de los trenes estaba previsto que viajaran otras seis personas. En total, la supresión del resto de servicios afectó a una veintena de pasajeros, aunque la compañía operadora no dio datos.


Por su parte, Izquierda Unida reclamó ayer mejoras inmediatas en la línea de Canfranc. Según informó Efe, fuentes de la plataforma de organizaciones en defensa del ferrocarril de Huesca vincularon el descarrilamiento al tránsito continuo de trenes que transportan toneladas de material pesado para la sustitución de la vía entre Caldearenas y Jaca.


Aunque hace casi un año que no se producen averías, en el verano de 2007 en solo dos meses se registraron seis. El 19 de julio se averió el canfranero en Sabiñánigo y casi un mes después, el 14 de agosto, volvió a estropearse con 26 viajeros a bordo. Al día siguiente, se detuvo en Plasencia del Monte. La cuarta avería en solo un mes se produjo el día 22 de agosto en Alerre. El 27 de septiembre volvió a fallar. Hace casi un año, el 6 de diciembre, el servicio de la tarde entre Canfranc y Zaragoza llegó con más de una hora de retraso.


En esta línea, el Gobierno de Aragón subvenciona uno de los trenes regionales diarios que viajan entre Zaragoza y Canfranc y otro solo entre Jaca y Canfranc, dentro del convenio anual que mantiene con Renfe por el que aporta 4,5 millones de euros.