Los empresarios piden a Fomento una solución para el congosto del Ventamillo

La decisión del Ministerio de Fomento de mejorar el tramo de la N-260 (Eje Pirenaico) entre Campo y el congosto del Ventamillo dejando al margen este desfiladero, no satisface a las organizaciones empresariales. La Confederación Empresarial de la Provincia de Huesca (Ceos-Cepyme) y la Cámara de Comercio e Industria se han dirigido por escrito a la ministra Magdalena Álvarez y al secretario de Estado de Planificación, el oscense Víctor Morlán, para reiterar la necesidad de acondicionar todo el trazado de la carretera que da a acceso al valle de Benasque, a partir de la localidad de Campo "y en todos los tramos que quedan pendientes, sin demorar el referente al congosto del Ventamillo".

Fomento ha manifestado que no actuará en los dos kilómetros de este desfiladero porque goza de protección ambiental (está declarado Lugar de Interés Comunitario). Se trata de un tramo muy estrecho, con un trazado sinuoso y continuos desprendimientos de piedras.

Fomento daba a conocer esta semana la contratación de la redacción del proyecto del tramo Campo-Congosto del Ventamillo, mientras que ya se están realizando obras desde aquí a la localidad de Castejón. En su carta al ministerio, los empresarios altoaragoneses expresan su satisfacción por esta actuación, "largamente esperada en la provincia", pero a continuación plantean a Magdalena Álvarez la necesidad de que se produzcan avances en los dos kilómetros del congosto. Es la única solución, dicen, para resolver de una vez por todas los problemas de comunicación del Valle de Benasque, con accesos muy deficientes pese a tratarse de una de las principales zonas turísticas de la Comunidad Autónoma, tanto en verano como en invierno.

Los presidentes de Ceos, José Luis López, y de la Cámara, Manuel Rodríguez, advierten en la carta de que, en caso contrario, dentro de unos años habrá una carretera modernizada casi en su totalidad "pero con un estrecho cuello de botella que impedirá su correcta funcionalidad", al ser el congosto el tramo más estrecho de la N-260.

Esta carretera vertebra el Pirineo de este a oeste. En Cataluña se ha avanzado mucho en los últimos años, pero en Aragón todavía hay tramos pendientes. Es el caso del recorrido entre las localidades de Campo y Castejón. El aumento del tráfico, tanto de turismos como de autobuses y camiones, ha complicado aún más las comunicaciones en el valle.