Pañoletas y albahaca para acompañar a San Lorenzo
Miles de oscenses han salido a la calle para participar en la procesión de su patrón el día grande de las fiestas.
La procesión de San Lorenzo en el día grande de las fiestas de Huesca ha sacado a la calle en la mañana de este 10 de agosto a miles de personas vestidas de verde y blanco que, portando ramos de albahaca, han acompañado la peana del santo en su recorrido por el centro de la ciudad.
La comitiva ha partido de la plaza de San Lorenzo antes de las 9.30. A esa hora, los cientos de oscenses, incluidos bebés, que han participado ataviados con trajes típicos aragoneses estaban preparados junto a la basílica del patrón de Huesca para emprender el camino hacia la plaza de Catedral al ritmo del dance de las Espadas.
La procesión tiene sus hitos y uno de ellos es el punto de unión entre las calles Ramiro el Monje (la Correría) y la plaza de San Pedro, conocido como el Rincón del Jerezano por el bar que estaba allí ubicado y que hace lustros cerró sus puertas. Era costumbre que aquí se juntara un grupo de personas que no estaba de acuerdo con la gestión municipal y que, al paso de la corporación municipal, lanzaran periódicos para mostrar su rechazo. Hoy, de todo aquello solo queda alguna que otra voz o gesto discordante, como la montera de plástico que alguien ha lanzado a los pies del alcalde, el socialista Luis Felipe, para reivindicar el mantenimiento de la Feria Taurina de San Lorenzo, cuyo futuro está en entredicho por el pacto de gobierno firmado por el PSOE con Cambiar y Aragón Si Puede. Por contra, una señora ha salido de entre la multitud y se ha acercado al primer edil para darle dos besos y un ramo de albahaca. Los aficionados al fútbol también han aportado su grano de arena y han gritado al paso de Javier Tebas, presidente de la Liga de Fútbol Profesional y que procesiona con el traje típico, para celebrar ¡Que ya estamos en Primera!.
Mientras los oscenses han aplaudido, comentado o criticado, el desfile ha avanzado por la estrechas calles del casco histórico. En algunos tramos, como en San Salvador, los Danzantes casi han pasado rozando las paredes de los edificios. Sin descanso alguno, han llegado al Ayuntamiento, donde siempre entran bailando, a pesar de los escalones. Aquí recuperan fuerzas para iniciar el camino de vuelta a la basílica, ya con el Cabildo Catedral incorporado.
La procesión se ensancha para bajar por la costanilla de Santiago, donde los cofrades que portan la peana de San Lorenzo se han tenido que esforzar para controlar el peso de la estructura y la velocidad. Hacia la mitad de esta calle han vuelto a hacer su aparición Los de la cuesta de Santiago, otro grupo de críticos con el trabajo municipal que tiene por costumbre acercarse al alcalde y entregarle, como al resto de concejales, un papel o un folleto reivindicativo. Esta vez, simulaba un programa de fiestas con actos alternativos.
La comitiva ha salido al Coso, donde los oscenses han podido ver con comodidad a los Danzantes y contemplar al santo, algunos incluso sentados en los veladores en los que no dejaban de servirse copiosos almuerzos. Con un cielo despejado y alejado el temor de la lluvia, la procesión ha llegado a la basílica de San Lorenzo, donde el obispo de Huesca, Julián Ruiz, ha oficiado la solemne misa.
Entre los invitados, además del alcalde de la ciudad francesa de Tarbes, Gérard Trémége, han estado la delegada del Gobierno en Aragón, Carmen Sánchez, la Subdelegada del Gobierno en Huesca, Isabel Blasco, la consejera de Economía del Gobierno de Aragón, Marta Gastón y autoridades de la capital oscense y la provincia.
