¿Está de acuerdo con el presidente Iglesias de que la crisis remontará a lo largo de 2010?

Parece más la expresión de un deseo que de una realidad incontrastable. Ojalá fuera así, pero los estudios indican la salida un poco más lejana. Si bien es cierto que en este tramo encontraremos mejoras que nos ayudarán a estar un poquito menos mal.

¿Cuánto tiempo calcula?

La crisis no será un punto y aparte, sino un proceso al cual llegaremos de la mejor manera si empezamos cuanto antes a acometer las medidas estructurales que desde todos los foros indican que debemos emprender.

¿Cuáles son las más básicas?

La liberalización energética, la eliminación de trabas administrativas, la potenciación de la marca de España aprovechando la presidencia española de la UE. Y también hay que ser ambiciosos en fiscalidad, ligándola a la productividad y al empleo productivo, además de acometer la flexibilización del mercado laboral.

¿Y la subida de impuestos ayuda a salir de la crisis?

Ayuda a equilibrar las cuentas públicas, pero también se puede hacer recortando el gasto. Y falta alguna medida en este sentido. Hace falta un Estado más eficiente.

¿Recuperaremos el nivel de renta y de empleo de estos años?

Va a ser un proceo muy largo y difícil. No creo que sea el objetivo, aunque ojalá se vuelva a alcanzar casi el pleno empleo en Aragón.

Dicen que con las crisis salen oportunidades. ¿Dónde se encuentran en la Comunidad?

Tenemos nuestros activos, como la situación geográfica, y debemos profundizar en ellos. Tenemos que ser capaces de potenciar negocios ligados con la logística y el I+D, y trabajar en general en crear empleo ligado a la excelencia y a la cualificación.

¿Cómo se consigue?

Con empresarios que lo vean y poderes públicos que incentiven ese camino, por ejemplo, con inversiones realmente productivas. El plan E crea empleo, pero hagamos que ese pan para hoy no sea hambre para mañana.

¿Qué opina del posible frente común para intentar minimizar los recorte de GM?

Es básico. Magna tiene sus criterios y eso no se puede mover, por lo que los poderes públicos deben moverse en el margen que queda. Evidentemente, habrá un recorte en el empleo y en la dimensión de Opel, que hoy no era viable y que, obviamente, habrá que asimilar una reducción de su volumen.

¿El impacto es seguro?

Es inevitable, desgraciadamente. Cuando se venden menos coches hay que redimensionar los factores de producción a lo que hay. Pero las medidas deben ser originadas por la situación, no por la entrada de Magna y por su decisión de que plantas más ineficientes sean las que absorban el empleo de una planta super eficiente como la de Figueruelas.

¿Los gobiernos han respondido adecuadamente ante la crisis y el caso de GM?

No se puede dar un diagnóstico cuando el proceso no ha terminado. Lo veremos al final, aunque sí es verdad que todos esperábamos una respuesta más contundente y coordinada.

Además de la automoción, ¿qué otros sectores sufrirán especialmente la crisis en Aragón?

El pequeño negocio es el que está sufriendo un impacto tremendo porque Aragón es una Comunidad de servicios.