El Ministerio de Fomento tan solo ha reservado 11,8 millones de euros en los Presupuestos de 2010 para uno de sus macroproyectos estrella, la conversión del vetusto eje ferroviario Cantábrico-Mediterráneo en un "corredor de altas prestaciones". a lo largo de sus 660 kilómetros de longitud. Con esta partida, apenas dará para avanzar en los estudios y acometer con demora la electrificación de la vía entre Zaragoza y Teruel, la única obra prevista. Pese a esta realidad, el Ministerio de Fomento pretende en breve escenificar su compromiso con esta infraestructura al presentar en Zaragoza el estudio funcional de la línea, que debía haberse entregado hace más de dos años.

La realidad inversora aún es más elocuente si se compara exclusivamente con lo que cuesta la modernización de la vía única entre Teruel y Valencia: 3.000 millones de euros, según dijo este mismo verano el secretario de Estado de Infraestructuras, el oscense Víctor Morlán.

La transformación del primer eje transversal del país fue vendido hace cinco años por la entonces ministra Magdalena Álvarez en Aragón como compensación por la negativa a acercar el AVE a Teruel, y desde entonces poco se ha avanzado. Hoy se conocerán los primeros diseños de un corredor que sigue como el siglo pasado, a excepción del tramo entre Zaragoza y Teruel. Es el único punto en el que se ha intervenido, aunque para continuar la renovación planificada e impulsada en su día por el Gobierno de Aznar.

La simple lectura de los Presupuestos de Fomento en las distintas comunidades por las que discurre la línea pone en evidencia el compromiso real del ministro José Blanco, que hace solo unos días en Zaragoza alardeaba de que este proyecto permitirá enlazar Valencia y Bilbao en cuatro horas, "cinco menos que en la actualidad". No aclaró cuándo se logrará la mejora ni mucho menos qué inversión iba a destinar para hacerlo realidad, lo que no le impidió decir que el sueño se iba a cumplir: "A finales de año será una realidad más cercana al ponerse en marchas las actuaciones en estos tramos".

Las citadas actuaciones se reducirán prácticamente a la electrificación de la vía entre Zaragoza-Teruel, dotada con una partida global de poco más de ocho millones de euros. Esta intervención, que ya fue anunciada para este verano, apenas servirá para que los trenes ganen en competitividad y tiempos de viaje, ya que la vía entre Teruel y Valencia seguirá sin electrificar y, por tanto, Renfe deberá seguir utilizando los trenes diésel.

En el mejor de los casos, podría licitar las obras del tramo entre Zaragoza y Tudela (de 53,5 kilómetros y a su vez subdividido en cuatro) a lo largo del próximo año, ya que se ha consignado una partida de un millón de euros. Para ello, los proyectos constructivos deberán entregarse a final de año, cumpliendo el plazo de redacción que en otros casos del corredor no se ha hecho.

Como contrapartida, desde la DGA aseguraron a este diario que el corredor tiene la consignación presupuestaria que debe tener. "No sería realista meter más dinero, porque está en fase de estudios y no se pueden acometer más obras que en Teruel", remarcaron.

Las partidas presupuestarias para el corredor aún son más paupérrimas en el resto de las comunidades que atraviesa el ferrocarril Cantábrico-Mediterráneo. Fomento solo prevé 300.00 euros el presupuesto regionalizado de Valencia para pagar el estudio informativo Teruel-Sagunto, que en los casos de estudios para los tramos de La Rioja y Navarra ascienden a 1 millón y a 721.380 euros, respectivamente. En el caso de Castilla y León, la partida no tiene siquiera un euro asignado.

Trámites previos

En el tramo riojano, de 70 kilómetros, se acaba de sacar a concurso la redacción del estudio informativo, mientras que Navarra contratará en breve la redacción de los proyectos del tramo entre Castejón y Pamplona (adelanta los trámites y luego paga el ministerio según el protocolo firmado en mayo). Sobre la conexión con la Y vasca, donde muere el corredor, aún se deben poner de acuerdo las Comunidades con Fomento sobre el trazado más idóneo antes de lanzar la tramitación.