Fomento bloqueará casi por completo la obra pública en las tres provincias

Ronda Norte de Zaragoza: Fomento tenía previsto abrir en otoño la mayor parte de la ampliación de este tramo del cuarto cinturón, pero ha decidido paralizar las obras y tendrá que esperar ahora hasta 2014. Con un presupuesto de 89 millones de euros, su construcción ha estado marcada por las vicisitudes. Primero, su ejecución por fases para garantizar unos mejores accesos a la Expo y luego, la falta de crédito del Ministerio.

Mallén-Figueruelas: El desdoblamiento de este tramo de la N-232 es una de las reivindicaciones históricas de Aragón ante la elevada siniestralidad que acumula, pero el Ministerio de Fomento tampoco prevé licitar las obras porque discurre una autovía en paralelo. No obstante, el secretario de Estado de Infraestructuras está abierto a negociar con la DGA, que plantea destinar los fondos del apeadero del AVE de Zaragoza a este proyecto, que garantizaría 40 de los 95,5 millones en los que se ha presupuestado.

Corredor Cantábrica-Mediterráneo: El PSOE vendió este eje ferroviario como compensación al descarte del AVE por Teruel y años después se queda en agua de borrajas. Del trazado aragonés solo se salvará la electrificación de la vía entre Zaragoza y Teruel, ya que el tramo hacia Navarra que debía licitarse en 2011 queda paralizado. Y la misma suerte correrá el nuevo trazado de Teruel a Valencia, ya que está valorado en 3.000 millones de euros.

A-68: El Gobierno de Aragón se plantea negociar la construcción de las variantes en Quinto, Azaila e Híjar ante la negativa de Fomento a impulsar la autovía de Castellón, cuyo estudio informativo valora la inversión en 459 millones de euros. Ni siquiera licitará el desdoblamiento del tramo hasta Fuentes de Ebro el próximo año, ya que ha ralentizado la redacción del proyecto. La situación llega hasta el punto de que ha rescindido la mejora de la N-232 entre Ráfales y Castellón.