Expoagua inicia la cloración para combatir el mejillón cebra que invade el Parque del Agua

La sociedad pública Expoagua ha empezado a clorar el agua del Parque del Agua para combatir la plaga del mejillón cebra, que no ha llegado a entrar en el sistema de climatización del recinto de Ranillas ni en los equipamientos del parque al aplicarse esta medida de antemano en las conducciones. Así lo aseguró ayer el presidente de la muestra, Roque Gistau, quien reconoció la dificultad de combatir contra una especie invasora que está en toda la cuenca del Ebro. Esta medida ha sido recomendada por la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), y se está a la espera de las indicaciones del Gobierno de Aragón, competente en el control de las especies invasivas.

Como informó este diario, miles de ejemplares de este molusco exótico han colonizado una balsa de riego del parque y se ha detectado la presencia de larvas en todas las muestras tomadas en los canales de Ranillas. La concentración es similar a la del río Ebro, de 0,45 larvas por litro (el mínimo para dar un resultado positivo es de 0,05). Ni los filtros instalados en las tomas de captación ni los tratamientos preventivos con dióxido de cloro han servido para evitar la expansión.

Además de clorar, la empresa que gestiona y mantiene el sistema hidráulico, Aguas de Barcelona, tiene previsto secar los canales una vez al año. Esta es una de las mejores medidas para erradicar los mejillones y no supondría un problema para la explotación, dado que la kilométrica red de canales y lagunas permite sectorizar la zona de actuación y que haya agua en el resto. La misma limpieza en profundidad se hará también anualmente en las tuberías de los equipamientos del parque, como las playas fluviales o el canal de aguas bravas.

Pese a estas labores preventivas, las invasiones serán periódicas por la propia situación del meandro de Ranillas. Con cada crecida del Ebro se inundará el parque, con lo que entrarán larvas y potenciales ejemplares adultos. Solo un mantenimiento exhaustivo podrá paliarlo, aunque los hechos demuestran que habrá que mejorar el sistema.

El director general de Expoagua, Jerónimo Blasco, dejó muy claro que la lucha contra el mejillón en el parque no será "muy costosa" y que las actuaciones no afectarán a los visitantes. "No se van a generar riesgos y los usos del parque no tienen ningún problema", sentenció.

El responsable del sistema hidráulico del parque, Marcelo López, explicó que el problema es "importante", y mostró su perplejidad por el hecho de que el mejillón haya invadido una balsa que estaba "absolutamente aislada" desde la primavera. En esta lámina viven miles de ejemplares, la mayoría con dos meses de vida. "Quiero conocer el origen", manifestó.

La preocupación ha llevado a movilizar a un equipo de especialistas de Aguas de Barcelona, con los que se pretende analizar la plaga y diseñar un plan de trabajo para intentar evitar posteriores invasiones. "Este parque tiene que saber coexistir con el mejillón cebra controlando las fuentes de entrada", remarcó.

Marcelo López no entiende muy bien cómo se ha producido la invasión, dado que casi toda el agua que ha entrado al parque provenía de la acequia del Rabal y la muestra analizada por la CHE ha resultado negativa.

Para colmo, el dióxido de cloro tampoco se ha mostrado eficaz para acabar con las larvas. El responsable del sistema hidráulico del parque aseguró que es un desinfectante y biocida muy efectivo, como lo ha demostrado con las bacterias o con la salmonela que transporta el agua de la acequia (proveniente del Gállego). "La efectividad en lo bacteriano es considerable, pero igual la dosis no es la necesaria para combatir el mejillón cebra. Pero este desinfectante lo ataca de una forma fortísima, solo superado por el ozono", explicó para mostrar su sorpresa por la capacidad de propagación del molusco en Ranillas.