LEY DE LENGUAS

El PSOE mantiene en su ley de lenguas el catalán y rechaza la cooficialidad

Ni se aceptó el cambio de la denominación del catalán por aragonés oriental, como proponía el PAR, ni la inclusión de la cooficialidad, como reclamaba CHA. El primer día de los tres previstos de ponencia de la ley de lenguas concluyó sin acuerdo y con el rechazo a dos de las reivindicaciones principales de los posibles aliados del PSOE para sacar adelante el texto. Los socialistas se apoyaron en PP y PAR para oponerse a propuestas de CHA e IU y en los nacionalistas e Izquierda Unida para vetar las de populares y aragonesistas.

En total, los representantes de los grupos parlamentarios analizaron 58 de las 258 enmiendas presentadas y solo se aceptaron algunas de poco calado. La única con enjundia que salió adelante fue la presentada por el PAR para que los Ayuntamientos decidan la denominación de su modalidad lingüística, independientemente de cómo se nombre en la ley la lengua. Pero se rechazó su idea de que se suprima la palabra catalán y se sustituya por la denominación "aragonés oriental". Esto complica cada vez más que los socios de gobierno, PSOE-PAR, consigan salvar la proposición de ley de los socialistas. Ninguno está dispuesto a dar su brazo a torcer.

CHA también planteaba un cambio sustancial en la ley introduciendo la cooficialidad y la enseñanza en las lenguas propias (catalán y aragonés), pero tampoco lo ha conseguido. Solo se incluyeron propuestas técnicas y de forma, al igual que a IU. A tenor de la primera jornada, parece que el PSOE no tiene intención de introducir ningún cambio sustancial en su texto inicial.

"Hemos visto más de 50 enmiendas y nada que se saliera del guión", observó el diputado del PP Miguel Navarro. Lo mismo opinó el portavoz de CHA, Chesús Bernal, que insistió en que el PSOE "quiere mantener su texto". María Herrero, del PAR, advirtió: "No nos vamos a mover de nuestras enmiendas". Además, la diputada aragonesista explicó que su socio no ha planteado ni siquiera una transaccional para modificar alguna y llegar a un acuerdo. El portavoz de IU, Adolfo Barrena, señaló que no ha existido ningún acercamiento hacia ellos de momento.

Por su parte, el coordinador de la ponencia, el socialista Carlos Álvarez, detalló que "la primera toma de contacto ha confirmado las posiciones de cada uno" y dejó claro que "no vamos a abandonar nuestra línea del texto". "En algunas cosas se suma el PAR y en otras, CHA", subrayó.

El calendario se mantiene

Pese a la falta de acuerdo y a las dificultades, los socialistas mantienen su calendario. Después del puente de la Constitución, se aprobará el dictamen final en la Comisión de Educación, Cultura y Deporte y se llevará al pleno del 17 de diciembre. Podría ocurrir incluso que los socialistas llegaran sin apoyos y no pudieran sacar adelante su proposición de ley.

Por otra, la plataforma "No hablamos catalán" ha convocado una concentración el próximo jueves, a las 11.00, ante las Cortes para protestar contra "la muy probable aprobación de la ley que oficializa el catalán como lengua de Aragón".

La propuesta socialista considera el catalán como una lengua voluntaria, no cooficial y circunscrita a los municipios en los que "su utilización sea históricamente predominante". De hecho, reconoce como "lenguas propias e históricas" el catalán y el aragonés, pero no su cooficialidad con el castellano, que se define como "única lengua oficial" en todo el territorio.