NEGOCIACIONES POLÍTICAS

El PAR tiene la llave de gobierno en 94 pueblos, 19 comarcas y en dos diputaciones provinciales

El PP quiere un pacto global, mientras el PSOE intenta salvar con sus hasta ahora socios el mayor número de instituciones. En dos semanas se despejará el horizonte político.

Rudi y Biel conversan en el plato de Aragón TV que acogió los debates electorales
Rudi y Biel conversan en el plato de Aragón TV que acogió los debates electorales
HA

No exageraba el presidente del PAR, José Ángel Biel, cuando sentenció en la noche electoral que su partido era «decisivo y determinante». El color político de hasta 94 alcaldías repartidas por todo Aragón depende de la decisión de los aragonesistas, que también están en disposición de elegir socio de gobierno en 19 de las 32 comarcas, además de poder pactar las diputaciones de Zaragoza y Teruel con populares y socialistas.


El PSOE tiene muy claro que quiere arrebatar el mayor número de instituciones al PP, por lo que ya ha iniciado contactos con sus hasta ahora socios del PAR para ofrecerles «el oro y el moro», en palabras de un aragonesista. El negociador oficial de las filas socialistas y mano derecha del presidente Iglesias, Miguel Gracia, y el presidente de la Diputación de Teruel, el socialista Antonio Arrufat, habrían mantenido los primeros acercamientos informales, aunque todo está bajo control de Biel. De hecho, marcó el martes terreno al anunciar que reunirá a todas las listas municipales para fijar una postura política en las dos próximas semanas. Y recordó que las diputaciones y consejos comarcales dependerán directamente de la ejecutiva.


Pese al retroceso del PAR en número de votos, casi 19.000 en las autonómicas y 16.537 en las municipales (un 17,5% de los que les apoyaron en 2007), su poder territorial se mantiene intacto. Es más, ha logrado nueve ediles más que hace cuatro años, hasta sumar 992, y tiene mayoría absoluta en 147 municipios.


Su capacidad de elección es amplia, lo que complicará las negociaciones al PP, proclive a un pacto global que incluya alcaldías, comarcas y diputaciones, además del Gobierno de Aragón. La presidenta popular, Luisa Fernanda Rudi, es muy consciente del escenario, que se le puede complicar muy mucho de no llegar a entenderse con el PAR. De hecho, los aragonesistas sumarían más instituciones con el PSOE que con el PP, a excepción del Ejecutivo autonómico. Y esta pieza de valor estratégico es la que pretenderían hacer valer los populares, ya que tienen 30 escaños. Pero ni siquiera en este caso dependen de sí mismos para gobernar en minoría, dado que requieren el apoyo del PAR en la investidura de Luisa Fernanda Rudi como presidenta.


Posición de peso


Con tan solo repasarse los resultados de los 731 municipios, uno se da cuenta que el PAR determina la alcaldía en un total de 94, ya sea porque pueda elegir socio al tener mayoría relativa (en 23 pueblos) o porque esté en condiciones de sumar con el PP (38) o con el PSOE (33). En esta lista se incluyen cuatro de las ocho localidades más pobladas de Aragón (Fraga, Monzón, Jaca y Alcañiz) y otras muchas de peso (Daroca, Benasque, Binéfar, Sariñena, Calamocha, Calanda e Híjar, entre otras).


La posición del PAR aún es más determinante en las comarcas. En manos de sus consejeros quedarán 19 de las 32 entidades, en las que podrán elegir socio entre el PP y el PSOE. En otras cinco también podría pactar, aunque en este caso exclusivamente con los socialistas, que a su vez podrían elegir entre sumar mayoría absoluta con el PAR, con otros partidos de izquierdas e incluso si formaran un tripartito. Y en una sexta comarca también podría garantizarla únicamente si se alía con el PP.


Su poder comarcal es casi total, hasta el punto de que tan solo se le escapan tres (Comunidad de Teruel, Tarazona-Moncayo y Valdejalón) a la hora de alcanzar acuerdos políticos.


Pocos diputados, pero de oro


La situación es similar en las diputaciones provinciales de Zaragoza y Teruel, donde podrá volver a elegir compañeros de gobierno. En el caso de la de Zaragoza, podría repetir con sus dos diputados el tripartito que se ha mantenido en las tres últimas legislaturas (PSOE, PAR y CHA) o aliarse con el PP. En la corporación provincial de Teruel también serán responsables de inclinar la balanza con sus cinco diputados, ya que el PP tiene diez y el PSOE, nueve.


Fuentes cercanas a Biel insistieron ayer en que el PAR «no debe nada» a los votantes del PP y los suyos han dejado claro con sus votos la necesidad de mantener una posición de fuerza. En este sentido, señalaron que Rudi puede hacer metáforas sobre que «la música» entre ambos partidos sea «bastante coincidente» y solo haya que «ajustar la letra», pero remarcaron que ellos solo hablarán de programa. En este sentido, incidieron en que es irrenunciable la bilateralidad con el Estado, el pleno desarrollo autonómico y la gestión de los remanentes de inversiones estatales y de la reserva hídrica. «Son cuestiones axiales», añadieron.


Todos los dirigentes del PAR consultados manifestaron que ellos no son los que deben mover ficha en estos momentos. «El PP ha ganado, tiene el diploma, pero si quiere, por ejemplo, que Alós sea alcaldesa de Huesca van a tener que hablar con nosotros. Estamos muy tranquilos, porque tenemos una enorme fuerza en el territorio. Aragón no solo es la DGA y el Ayuntamiento de Zaragoza», indicaron.