El brote de sarna surgido en el Hospital Ernest Lluch de Calatayud, el más grave registrado en Aragón esta década, amenaza con elevar día a día el número de afectados durante las próximas semanas. El número de personas que se han contagiado desde el martes de esta enfermedad alcanzaba ayer las 49, dieciseis más que el miércoles. Además, el tipo de enfermedad, provocada por un ácaro y cuya transmisión es relativamente sencilla, lleva a pensar que el goteo va a ser constante. Las autoridades sanitarias, sin embargo, recuerdan que las dolencias que causa esta afección no son graves y que se han tomado las medidas para frenar su expansión.

La mayor parte de los nuevos casos diagnosticados son trabajadores del centro sanitario, cuatro en concreto. Además, hay un paciente y otras dos personas que han estado en contacto con alguno de los ya infectados. De este modo, de los 49 casos detectados, 30 son personal sanitario, seis pacientes y nueve de los llamados casos ambulatorios. Desde el Gobierno de Aragón se esperaba que las cifras fueran incluso mayores a estas alturas. Sin embargo, sí se constata que el avance de la afecciones fuera de las paredes del Ernest Lluch no se ha detenido.

La aparición de esta enfermedad, también llamada escabiosis, no debería provocar grandes trastornos a la actividad diaria del hospital, que ya vivió situaciones problemáticas hace dos semanas con el recrudecimiento de patologías ligadas al frío y la niebla. De hecho, según informaron desde el Gobierno de Aragón, algunos de los trabajadores que causaron baja hace 48 horas al constatar que habían contraído la sarna regresaron ayer a su puesto habitual.

Ayer, la tranquilidad era una constante en el Hospital Ernest Lluch, incluso en la zona de Enfermería C, que es donde surgieron los primeros casos de escabiosis. Las conversaciones entre los pacientes, familiares y el personal sanitario sí que delataban sin embargo cierta inquietud por las últimas noticias.

Lo cierto es que la rápida aparición de este brote hace pensar que el número de casos aumentará día a día al mismo ritmo en que lo ha hecho desde que fue dado a conocer, el pasado martes. Entonces se declararon 15 casos, por 33 el miércoles, 40 ayer y nueve más hoy. Al parecer, el primer contagio provino de un paciente hospitalizado en medicina interna que murió por motivos distintos a la sarna. A esta persona se le trató la escabiosis como una dermatitis o una soriasis.

Tratamiento preventivo

La subdirectora provincial de Salud Pública, Marisa Espinosa, destacó que se han "extremado las medidas" con el objetivo de evitar su propagación. "Para los que han estado en contacto con alguno de los casos diagnosticados, se ha aplicado un tratamiento preventivo", dijo. Del mismo modo, se han puesto más énfasis en hábitos "higiénicos y de manipulación", con guantes u otros materiales desechables. Otra medida aplicada, para quienes han estado en contacto con un afectado, es el lavado de la ropa de cama y de la personas con agua caliente. El microscópico ácaro que causa la sarna sobrevive sin estar en contacto con la piel un máximo de 48 horas.

La responsable sanitaria consideró que, dentro el hospital bilbilitano, el brote "está bajo control", aunque no descartó que puedan aparecer "otros casos". Mientras, en el exterior "se ha investigado y localizado" a las personas que han estado en contacto con los enfermos, aunque como es lógico el control fuera del centro hospitalario resulta menos eficaz. Finalmente, Espinosa recordó que la sarna constituye una enfermedad "muy molesta" que sin embargo no tiene más síntomas que "picores" y "lesiones en la piel por el rascado" que ocasionan.