TRIBUNALES

El alcalde de Benasque se niega a valorar su segundo varapalo judicial en apenas dos meses

Aramón debe decidir qué hace con los suelos que había vendido por 105 millones y que le fueron devueltos al pararse la operación.

El alcalde de Benasque, el regionalista José Ignacio Abadías, eludió ayer hacer declaraciones tras conocer la sentencia del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Huesca que anula el acuerdo del Ayuntamiento de Benasque que en mayo del año pasado bloqueó las operaciones urbanísticas de Aramón en Cerler. El primer edil alegó "no conocer el contenido del fallo" para negarse a hacer valoraciones sobre las repercusiones que tendrá en la guerra abierta que mantiene contra el grupo aragonés de la nieve.


La sentencia supone el segundo varapalo judicial para Abadías en apenas dos meses. Además de que ha sido anulada la polémica declaración de litigiosidad que él impulsó dando lugar a todo tipo de suspicacias, el titular del Juzgado de Boltaña tuvo una mención especial para el alcalde en la sentencia que desestimó la demanda contra Aramón de los antiguos propietarios de Cerler.


En ese proceso civil el Ayuntamiento no participa, pero el primer edil benasqués no ha logrado dar la sensación de estar al margen de los vecinos. Por eso resultó especialmente llamativo que el juez de Boltaña, en uno de sus razonamientos jurídicos, hiciera uso de artículo 376 de la Ley de Enjuiciamiento Civil para, "en atención a las reglas de la sana crítica", dejar claro que valora "negativamente" la declara- ción testifical de Abadías en el juicio oral.


El alcalde debe aclarar ahora si el Consistorio va a recurrir la sentencia de ayer ante el Tribunal Superior de Justicia de Aragón. También está la incógnita de saber qué va a suceder con la unidad de ejecución número 2, en especial si también va a ser declarada litigiosa, ya que es ahí donde Aramón tiene la mayor parte de sus terrenos y por tanto todo podría volver a bloquearse. Según han reiterado fuentes del Ayuntamiento, en ese caso los informes de los técnicos han sido favorables a la litigiosidad desde un principio.


Un respaldo que llega tarde


Por su parte, fuentes oficiales de Aramón valoraron ayer "muy positivamente" el fallo hecho público ayer. "Estábamos convencidos de que iba a ser favorable porque tenemos la tranquilidad de haber hecho las cosas bien y de haber actuado siempre de buena fe y de forma absolutamente escrupulosa", añadieron. Las mismas fuentes explicaron que será la semana que viene, una vez analizada la sentencia, cuando la empresa mixta participada al 50% por la DGA e Ibercaja se plantee qué hacer a partir de ahora.


A pesar de haberle dado la razón en primera instancia, lo que los tribunales ya no pueden solucionar es la fallida operación de venta de los terrenos de Aramón en Cerler. Después de haber llegado a un acuerdo con un grupo de empresas que compraron esos suelos por más de 100 millones de euros, el bloqueo que sufrió el proceso tras la declaración de litigiosidad, unido a la crisis del mercado inmobiliario, provocó que los compradores se echaran atrás y decidiesen resolver el contrato sin penalización alguna acogiéndose a una de sus cláusulas.


A falta de saber qué sucederá con la UE2, el fallo de ayer despeja una posible nueva venta de las parcelas. No obstante, la empresa debe valorar si le compensa desprenderse de ellas en un contexto que le aboca a recibir bastante menos dinero que antes.