NUEVO OBISPO DE TERUEL

Carlos Escribano: "La familia es motor de evangelización"

El actual vicario episcopal de Zaragoza y párroco de Santa Engracia, de 45 años, ocupará la vacante dejada por José Manuel Lorca.

Carlos Escribano besa a su padre tras el anuncio de su nombramiento. Al fondo, su madre.
Carlos Escribano: "La familia es motor de evangelización"
CARLOS MONCíN

Joven (cumplirá 46 años en agosto), preparado y moderno. Ese es el perfil que se ha buscado para dirigir la diócesis de Teruel y Albarracín, vacante desde el traslado a Cartagena de su anterior titular, José Manuel Lorca, en julio del año pasado.


El nombramiento de Carlos Escribano, que dio a conocer ayer el Papa, tiene más de apuesta de futuro que de reconocimiento a una trayectoria. Se espera que se maneje con soltura en su diócesis (96.000 habitantes, 262 parroquias, 133 sacerdotes) para encarar retos mayores. Pero nada de esto pasaba ayer por la cabeza del nuevo obispo, que aseguraba sentirse "abrumado por la invitación del Santo Padre". "Necesito vuestras oraciones -dijo-, porque la misión que se me ha encomendado está por encima de mis fuerzas".


Carlos-Manuel Escribano Subías nació el 15 de agosto de 1964 en Carballo (La Coruña). Entró en el Seminario Mayor de Lérida y fue enviado a Roma para completar sus estudios. Ordenado sacerdote en julio de 1996, quedó incardinado en la diócesis de Zaragoza, donde ha trabajado en dos parroquias, la de Santa Engracia (donde fue vicario entre 1996 y 2000, y es párroco desde 2008) y la del Sagrado Corazón (párroco entre 2000 y 2008). "Conozco algo Teruel y algunos de los sacerdotes han sido mis alumnos -aseguraba ayer-. Pero me tengo que patear mucho la diócesis y hablar con mucha gente".


Actualmente es vicario episcopal del sector centro de la archidiócesis de Zaragoza, profesor del Centro Regional de Estudios Teológicos de Aragón (CRETA) desde 2005, consiliario de la delegación episcopal de Familia y Vida desde el año 2006, y consiliario de la Asociación Católica de Propagandistas, entidad que hace unos meses reclamaba una mayor presencia de los católicos en la vida política, y que incluso deslizó la posibilidad de crear un nuevo partido político.


Carlos Escribano es un hombre 'muy de parroquia' y pegado al terreno. En su vocabulario hay una palabra clave: 'familia'. "La familia es Evangelización doméstica -dijo-. Es el gran sujeto de la evangelización en este tercer milenio: su motor".


Para la toma de posesión de Escribano no hay fecha, y de las sedes episcopales vacantes de Huesca, Jaca y Tarazona, por el momento nada se sabe.