"En actos así hay sustancias ilegales, pero no hay que vincularlas al festival"

"En este tipo de certámenes hay sustancias ilegales, y eso no lo puede negar nadie, pero no hay que vincularlas directamente con el nombre del festival". Así valoró ayer el alcalde de Fraga, José Luis Moret, el balance de la operación antidroga desarrollada el pasado fin de semana por la Guardia Civil en el entorno del Monegros Desert 2010.

Moret alabó el trabajo desarrollado por los 200 agentes que se desplegaron para garantizar la seguridad en las inmediaciones del certamen musical. "Ha sido un operativo acorde a un evento de este tipo, ya sea en Fraga en Benicasim o en Madrid, y las cifras demuestran que han rozado la perfección. Y que actúen con tanto rigor me parece estupendo", dijo.

A este respecto, el alcalde de Fraga quiso destacar que pese a la masiva afluencia de público, "no ha habido ni un solo incidente de peleas ni de problemas en la calle prácticamente en ninguna de las dieciséis ediciones". "Son personas para nada conflictivas que se limitan a venir, a disfrutar de la fiesta y luego se van", añadió.

Para Moret, el elevado número de denuncias por drogas es una prueba más que evidente de que existe un problema social "porque si en las fiestas de San Lorenzo de Huesca se juntan también 40.000 personas, ocurrirá lo mismo a lo mejor". No obstante, también incidió en que "a nadie le obligan a tomarlas ni a comprarlas".

Los hoteles y el campin, llenos

Con todo, el alcalde de Fraga prefiere quedarse con el lado más positivo del festival, que no es otro que el impacto económico que tiene sobre los comercios, hoteles, bares y restaurantes de la ciudad durante todo un fin de semana, "porque conlleva un movimiento de personas y de negocio para todo el entorno". El campin y el hotel Casanova, dos de los establecimientos con más plazas de la ciudad, estuvieron llenos todo el fin de semana. "Esto demuestra que Fraga está viva y que tenemos muchos atractivos aunque este, por cantidad, sea el más importante", resaltó Moret.

De hecho, solo cabe recordar que el cierre el año pasado por obras de la discoteca Florida 135 de Fraga, promotora de este estival de música, redujo la ocupación de hoteles y hostales más de un 70% durante una veintena de fines de semana. "Es como cualquier negocio que necesita indirectamente camiones, electricistas pero también camareros, gasolineras, pensiones o el campin", destacó el alcalde de Fraga.

Por último, subrayó que el nombre de la ciudad ha traspasado fronteras gracias a este macrofestival. "Este año han venido muchos autobuses de otros países e incluso se ha notado mucho en el aeropuerto de Lérida", afirmó.