medio ambiente
Aragón, destino de residuos ilegales de Europa: la Guardia Civil frena el “negociazo” de la basura
El comandante de la Guardia Civil Carlos Astrain destaca que la línea detectada en las empresas de Fraga y Barcelona movió 16 millones de euros desde 2020.
El sistema era simple. Se recogían residuos en Francia, a los emisores se les cobraba el traslado, tratamiento y depósito legal de los mismos. Pero estas operaciones no se realizaban nunca. Sino que, directamente, se traían los residuos a Zaragoza sin tratamiento alguno, falsificando la documentación del proceso. Y se depositaban en los vertederos aragoneses sin más, aunque se tratara de residuos tóxicos.
La Operación ‘Poubelle’ de la Guardia Civil se desarrolló en varias localidades de Aragón y Cataluña para frenar el transporte ilegal de residuos procedentes de Europa, en concreto de Francia a Italia. Esta operación ha supuesto el freno de un “negociazo” de empresas como Ecovert (Ecología y Vertidos Bajo Cinca S. l. ), situada en Fraga, y Waste Prevention, ubicada en Tarrasa (Barcelona). Así es como lo califica el comandante de la UCOMA (Unidad Central Operativa de Medio Ambiente) Carlos Astrain, en declaraciones a HERALDO, al detallar cómo desvelaron esta trama, que llevaba trabajando desde el año 2020 y habría movido en torno a 16 millones de euros.
“Parte de este dinero se usaba para sufragar el coste del transporte, pero gran parte era beneficio puro (del negocio)”, asegura el comandante, quien confirma que el traslado de residuos ilegales detectado se ha prolongado durante los últimos tres años. “Estas empresas apenas tenían volumen de negocio hasta 2020, cuando se empezó a articular esta trama. Esto es un ‘negociazo”, lo define.
Los efectivos de la Guardia Civil llevaban un tiempo de seguimiento de los camiones (desde marzo, cuando les llegó el caso a través de miembros del Centro Nacional de Inteligencia, hasta diciembre) y la organización criminal habría contratado los servicios de empresas de recogida de residuos francesas e italianas para deshacerse de los mismos en el vertedero de Rinza (Residuos Industriales de Zaragoza) por distintas vías. “Como es algo novedoso, cuesta efectuar la investigación”, reconoce el comandante. “Establecimos unas vigilancias puntuales y en un día fuerte podían llegar 20 camiones”.
El residuo de Francia igual al destruido en España
El oficial detalla que el método habitual era fingir una serie de operaciones de diferentes empresas en España, interpuestas entre el origen del residuo en los dos países de la Unión Europea, para “simular” que se estaban “haciendo correctamente las cosas”. “Pero en la práctica el residuo que salía era el mismo que se destruía y no se hacía ningún tratamiento. Ese era el problema”, agrega el comandante Astrain, puesto que los residuos se llevaban directamente al vertedero de la capital aragonesa.
Asimismo, destaca que el vertedero de Zaragoza “está legalizado, aunque no para recibir lo que viene de fuera de Aragón”. Al detallar el procedimiento utilizado, la UCOMA descubrió que en las instalaciones de la empresa Ecovert de Fraga “también estaban vertiendo y enterrando residuos (todavía se está realizando el informe pericial sobre el segundo vertedero) aunque otros se llevaban a Zaragoza”.
La Guardia Civil realizó una macroperación en la que intervinieron unos 70 efectivos entre la UCOMA de Madrid, Zaragoza y Huesca, junto a los miembros de los Grupos Rurales de Seguridad (GRS) y de la Unidad de Seguridad Ciudadana (USECI) de las provincias de Huesca, Lérida y Barcelona.
Como adelantó HERALDO, tras la investigación de la Guardia Civil, se produjo el ingreso en prisión provisional de los dos empresarios de las sociedades Ecovert, de Fraga (Huesca), y Waste Prevention, de Tarrasa (Barcelona), después de su declaración ante el Juzgado de Fraga como presuntos autores de un delito medio ambiental con residuos transportados desde varias empresas de Francia e Italia.
El Juzgado de Fraga ha citado a más trabajadores de las empresas implicadas en la red para el próximo 26 de enero y 6 de febrero. Letrados como Jorge Piedrafita, que representa a empleadas de secretaría, sostienen que sus clientes ignoraban todo esta historia del transporte ilegal de los residuos desde Francia e Italia hacia Zaragoza a través de la intervención de Ecovert.
Origen de los países europeos
El comandante Carlos Astrain reconoce que los países de donde proceden estos residuos son tanto Francia como Italia. Además, agrega que una de las empresas de los camiones utilizados para estos traslados procede de Alcañiz y su destino habitual era Zaragoza.
La Guardia Civil pudo identificar una serie de empresas interrelacionadas y establecidas entre el sur de Francia y las comunidades de Cataluña y Aragón, que comerciaban a grandes niveles con residuos procedentes de Europa. Así, verificaron decenas de camiones que entraban en las instalaciones de gestión de residuos controladas por la organización (la empresa Ecovert, de Fraga), pero que, en lugar de someter la carga a procesos de valoración, era redirigida directamente a un vertedero en Zaragoza.
Una vez identificada la “trama completa”, se comprobó cómo se realizaban contratos internacionales para la gestión de residuos entre el productor europeo y el vertedero español, que simulaban diferentes tratamientos y operaciones que nunca se realizaban para que, al menos a nivel documental, pareciese que todo se hacía acorde con la legislación vigente.
La Guardia Civil comprobó que “diariamente” se enterraban en Zaragoza toneladas de residuos, de todo tipo, incluyendo los peligrosos y tóxicos, a costa de de “un daño casi irreparable” en los ecosistemas y la salud de las poblaciones colindantes.
En su intervención, los efectivos de la UCOMA realizaron seis entradas y registros en domicilios y sedes de personas jurídicas en Fraga (Huesca), en la empresa Ecovert, en Tarrasa (Barcelona) en Waste Prevention, y otra sociedad propietaria de los camiones en Alcañiz.
Asimismo, intervinieron diez teléfonos móviles, seis discos duros, cuatro ordenadores portátiles, nueve ‘pen drives’, tres tarjetas de memoria, diversa documentación, 24.870 euros en efectivo y se han volcado las bases de datos y los correos electrónicos de las personas jurídicas investigadas (en total de 25, de ellos 19 personas físicas y seis jurídicas), así como de los detenidos (los dos dueños de las empresas de Fraga y Tarrasa).
Multa del Gobierno de Aragón
El comandante de UCOMA destaca que en la investigación secreta para el Juzgado de Fraga también colaboraron el Gobierno de Aragón, que actuó de manera discreta imponiendo una multa administrativa a las empresas implicadas (Ecovert y Waste Prevention), pero “a ellos eso no les disuadía”.
Respecto a la actuación de la DGA, Luis Clarión, secretario de Salud Laboral de Comisiones Obreras, criticó que se hayan reducido los controles ambientales en los vertederos al aplicar el Plan de Residuos.
De hecho, Clarimón precisó que el vertedero Rinza es privado pero ocupa un terreno público y lo compara “como el concesionario que lleva un autobús”. En este sentido, agregó que Aragón es un territorio de vertedero “con el riesgo de recibir mucho residuo” por la falta de población, el espacio que dispone y en el terreno arcilloso.
El vertedero Rinza es "el elegido"
Aun así, el oficial de la Guardia Civil precisa que Rinza “no tiene responsabilidad” porque sobre el papel reciben unos residuos que supuestamente proceden de una empresa de Aragón y puede parecer “legal”. En este sentido, cargan la culpa sobre las sociedades de Fraga y Tarrasa como presuntos autores de un delito medio ambiental, falsificación y organización criminal.
Como han detectado que esta manera de actuar se ha multiplicado entre los empresarios que “han visto un filón”, el comandante reconoce que los implicados no son los únicos que se dedicaban a esta actuación. “Hay un volumen mayor y hemos interceptado una línea de suministro, pero como estos hay algunos más”, incide. “Pero el vertedero Rinza de Zaragoza es el predilecto para las empresas extranjeras para traer aquí sus residuos”.
La diferencia es clara para la Guardia Civil porque deshacerse de una tonelada de residuos urbanos cuesta 250 euros en Francia, por la recogida, el tratamiento y eliminación que implic. Mientras que en España apenas les sale por 40 euros. Lo que supondría que si en el país vecino pagaban 5.000 euros por llevar 20 toneladas de residuos para su gestión, apenas abonan 800 en Zaragoza y lo demás es el amplio margen de ganancias del tratamiento ilícito del la basura.
El responsable de la UCOMA, Carlos Astrain, agradece “el apoyo que han tenido en la justicia”, la juez Paula Goberna y la fiscal Victoria Arenere, con la investigación del tráfico de residuos, un delito medioambiental que consideran importante frenar en la sociedad española.
