El brote de gastroenteritis de Tarazona va a más y afecta ya a 234 personas

El Ayuntamiento turiasonense espera conocer todas las analíticas hechas para decidir si lleva a cabo una hipercloración de la red de abastecimiento.

Una mujer, este martes, leyendo el bando colocado por el Ayuntamiento para avisar de la prohibición del consumo de agua.
Una mujer, este martes, leyendo el bando colocado por el Ayuntamiento para avisar de la prohibición del consumo de agua.
Ayuntamiento de Tarazona

El brote de gastroenteritis declarado en el municipio de Tarazona desde principios de esta semana sigue creciendo y deja ya 234 afectados, frente a los 196 contabilizados el miércoles, según el dato actualizado este jueves por el Departamento de Sanidad del Gobierno aragonés. Todos los pacientes presentan un cuadro de vómitos y diarreas y no hay ningún caso grave.

Hasta el momento, el procedimiento epidemiológico no ha detectado el foco original del problema y los análisis de las muestras de agua por ahora han dado "resultados negativos" por lo que la investigación continúa, ha explicado el consejero de Sanidad, José Luis Bancalero. 

Por ello se siguen tomando pruebas de diferentes puntos de la red de abastecimiento del municipio, ya que no se puede descartar todavía que la bactería esté en el agua de boca. También se está a la espera de las conclusiones de los coprocultivos hechos a los pacientes. El coprocultivo es un examen de laboratorio para encontrar organismos en las heces que puedan causar enfermedad y síntomas gastrointestinales.

Como "medida excepcional", según Bancalero, se ha recomendado al Concejo turiasonense lleva a cabo una "hipercloración" de la red de suministro "no porque sea necesario, sino para prevenir"

No obstante, de momento el Ayuntamiento turiasonense ha recordado que hasta la fecha los parámetros analizados están bien y ha decidido esperar a que esté "toda la analítica completa" antes de tomar esta decisión, ha señalado la teniente de alcalde del Consistorio turiasonense, Cristina Sainz. 

Esta hipercloración supondría que el agua del grifo no se podría usar ni para lavar la ropa ni para el aseo personal para evitar posibles problemas de irritaciones en la piel. En caso de llevarse a cabo se tendría que alertar a toda la población para que durante varias horas no utilizaran para nada el agua de boca. 

Desde el lunes, el Ayuntamiento y Salud Pública mantienen la prohibición de consumir agua de boca para beber y cocinar, aunque sí que está permitido su uso para la limpieza. Además, el Consistorio, para ayudar a los más vulnerables, está repartiendo, en colaboración con Mercadona y Cruz Toja, garrafas de agua.

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