Francisco Juárez, del movimiento vecinal a número 1 de Aragón Existe al Congreso
Este zaragozano de nacimiento y apasionado de la provincia turolense lleva más de dos décadas vinculado al movimiento ciudadano Teruel Existe.
Dice de sí mismo Francisco Juárez que es fruto de la emigración del campo a la gran ciudad de Zaragoza. De padre turolense y madre oscense se crió en el barrio de Las Delicias ayudando a su madre que regentaba una droguería y a su padre pintor de profesión.
Tras superar las oposiciones de acceso al Cuerpo Ejecutivo de la Comunidad Autónoma de Aragón fue destinado a Teruel, donde desempeñó distintos puestos en Sanidad, Industria, Comercio y Consumo. Fue el único inspector de Comercio primero, y de Consumo después, de la provincia durante más de una década, lo que le permitió, cuenta, ver cón sus propios ojos cómo muchos comercios iban cerrando.
Como portavoz del Movimiento ciudadano Teruel Existe, desde finales del año 2000 hasta 2006 desarrolló una amplia actividad llevando las reivindicaciones a la Comunidad autónoma, al Estado y a la Unión Europea. Fue el principal organizador de la manifestación en Bruselas y de las reuniones con los grupos parlamentarios europeos, Comisión Europea y Comité de las Regiones (julio 2002).
Su creencia en un proyecto que ha defendido durante más de 22 años es lo que dice le ha atraído a Aragón Existe. El pasado noviembre fue elegido coordinador general de la Ejecutiva del partido político en la primera asamblea general de la formación.
En esta campaña, algunos de los temas en los que se ha centrado han sido el rechazo al trasvase como un proyecto insostenible, que expolia recursos endógenos sin cubrir nuestras necesidades, y el impulso definitivo a la visa sanitaria, una tarjeta común para toda España que permita el acceso al historial clínico de cada paciente, consiguiendo así un uso más eficaz de los recursos sanitarios.
Juárez también ha propuesto incrementar la inversión en la defensa y rehabilitación del patrimonio histórico, artístico y cultural. La necesidad de un equilibrio territorial, el cambio climático, el mal desarrollo de las energías renovables, además de lograr que Aragón cuente con una voz propia en Madrid, son reivindicaciones que están siempre presentes en su discurso.
