Lambán cierra una legislatura de “recuperación” y “diálogo” entre críticas por las promesas incumplidas

El último pleno ordinario en las Cortes de Aragón antes de las elecciones del 28-M (habrá una sesión escoba el próximo mes) ha sonado a balance y despedida. Y ha sido un fiel reflejo del transcurso de esta agitada legislatura. El presidente del Gobierno, Javier Lambán, ha comparecido a petición propia para defender cuatro años de gestión que han servido, a su juicio, para recuperar unos servicios públicos “destrozados” por la derecha y para atraer inversiones que generan empleo gracias a una estrategia basada en el “diálogo”. Por contra, la oposición le ha acusado de vivir en una “ensoñación” y de incumplir sus promesas pese a haber disparado la recaudación y el gasto.

Lambán ha recordado que la legislatura ha estado marcada por la pandemia, que se afrontó “con criterios científicos, nunca políticos” para salvar vidas. “Estuvimos a la altura”, ha asegurado el presidente, que pese a esas dificultades, ha defendido la “recuperación” de Aragón frente a los “recortes” que aplicó la derecha en el periodo 2011-2015. “Desde que llegamos al Gobierno, somos una de las tres comunidades que más han aumentado la inversión”, ha apuntado, con esfuerzos presupuestarios “importantes” en sanidad y educación, así como en carreteras o gestión de aguas residuales.

El dirigente socialista, además, ha sacado pecho de la creación de empleo en estos últimos años, “equilibrando las oportunidades del medio rural y del urbano”. Por un lado, con actuaciones para mejorar la banda ancha, la financiación local, las explotaciones agrarias y la fiscalidad diferenciada del territorio, y por el otro, con inversiones en Zaragoza, desde los centros de salud y educativos hasta las 500 viviendas públicas de la Expo, entre otras. Así, Lambán ha destacado que Aragón es la comunidad donde más baja el paro y más crece el PIB.

Finalmente, el presidente ha hecho valer el “modelo de cogobernanza” así como la “transversalidad, moderación y acuerdo” de un Gobierno cuatripartito que ha logrado, ha indicado, “estabilidad, seguridad jurídica y una política fiscal moderada y equilibrada”, entre otros avances. Por ello, a dos meses de las elecciones, Lambán ha reivindicado su gestión para lograr revalidar el Pignatelli. “Sabemos cómo hacerlo, esperamos que algún día quienes viven en la Edad Media decidan ponerse las pilas e incorporarse al camino del éxito”, ha concluido, en referencia a las bancadas de la derecha.

“Mitin de despedida”

Desde esa bancada se ha dirigido al atril la portavoz del PP, Mar Vaquero, que le ha reprochado su “distanciamiento con la realidad” tras un discurso que ha calificado de “mitin con sabor a despedida”. La diputada popular ha asegurado que Lambán ha tratado de “recuperar en el tiempo de descuento lo que ha perdido durante la legislatura” y ha criticado los proyectos que quedan en el tintero. “Se le recordará por ser el presidente más prometedor y menos cumplidor”.

Vaquero ha cuestionado que Lambán haya hablado “con los autónomos que cada vez les cuesta más subir la persiana”, con los pacientes que “piden cita médica y se encuentran con un contestador”, con los vecinos del medio rural “que tienen miedo a enfermar por si no llega la ambulancia” o con “alguna niña violada o sus familias, que ahora han visto que se ha rebajado la pena de su agresor” por la ley del ‘solo sí es sí’. Una reforma legal que ha servido a la portavoz del PP para recordarle al barón socialista que “no podrá decir ni una sola vez que ha votado diferente a Pedro Sánchez”.

Las críticas, no obstante, han comenzado desde la izquierda. El portavoz de IU, Álvaro Sanz, ha lamentado que Lambán no haya cumplido los acuerdos adquiridos con su formación para apoyar la investidura del presidente. Así, ha reprochado el proyecto de la unión de estaciones, la precariedad del empleo creado o la falta de viviendas públicas.

En cambio, los socios del cuatripartito han defendido los cuatro años de gestión. Marta de Santos (Podemos) ha destacado la protección de los más vulnerables y la progresividad fiscal impulsada por la formación morada. Joaquín Palacín (CHA) ha enfatizado la “estabilidad” de cuatro presupuestos en “tiempo y forma” pero ha lamentado que la legislatura acabe con el “desacuerdo” respecto a la unión de estaciones, que Chunta rechaza. Y Jesús Guerrero (PAR) ha defendido la “moderación y respeto” de un curso político en el que se han apoyado los servicios públicos, ha dicho, con siete de cada diez euros del presupuesto para sanidad y educación.

El portavoz de Cs, Daniel Pérez, ha argumentado por su parte que la formación liberal ha “antepuesto el interés de los aragoneses frente a los intereses personales o partidistas”, y se ha mostrado “orgulloso” de participar en esa especie de “gobierno de concentración” que supuso la mesa de reconstrucción ante la covid. Pérez, que aún valor si acepta la designación del partido como candidato a la Alcaldía de Zaragoza, ha asegurado que tras prestar su apoyo al gobierno en cuestiones clave entre críticas de otras formaciones, se va con la “certeza” de hacer “lo que debía”.

Finalmente, Santiago Morón (Vox) ha criticado la “incapacidad de gestión presupuestaria” del cuatripartito, un Gobierno que “ha recaudado más que nunca a costa de los aragoneses y gastado más que nunca sin garantizar los servicios públicos”.