La patronal de la limpieza pagará el SMI y subirá el precio a sus clientes en Huesca

Las empresas asociadas a Afelin señalan que el elevado incremento del Salario Mínimo Interprofesional para 2023 se verán "obligadas a repercutir parte del mismo" a las tarifas del servicio. 

Las trabajadoras de la limpieza de edificios y locales de Huesca en el quinto día de huelga indefinida.
Las trabajadoras de la limpieza de edificios y locales de Huesca en el quinto día de huelga indefinida.
Heraldo.es

La Asociación Provincial de Empresarios del sector de limpiezas de edificios y locales de Huesca (APEL-Afelin) está dispuesta a continuar abonando el SMI (Salario Mínimo Interprofesional)  a sus trabajadoras para cumplir con la legislación laboral vigente, "en todos sus aspectos". Este miércoles, la patronal y los sindicatos UGT y CC.OO. comienzan  a negociar el preacuerdo alcanzado hace unos días y que propició la suspensión provisional de la huelga indefinida iniciada el 16 de enero. 

Apel-Afelin ha manifestado su "deseo" de llegar a la firma de un convenio colectivo "razonable para todas las partes, de tal forma y manera que no se pongan en peligro ni los puestos de trabajo ni la viabilidad de las empresas del sector". La asociación provincial ha señalado, además, que tras conocerse la decisión del Gobierno central de incrementar un 8% el SMI para 2023, lo que se aplicará a las nóminas de las plantillas, se van a revisar "las tarifas aplicadas a nuestros clientes". 

A este respecto, la patronal insiste en que el elevado incremento del Salario Mínimo Interprofesional, que desde el año 2016 hasta el presente es del 65%, supone un coste "difícilmente asumible por las empresas ante la enorme dificultad de trasladarlo a los clientes, cuestión que solo se ha podido realizar parcialmente". Según indican, este aumento, "que incide directamente en nuestra masa salarial", es muy superior a la media de las subidas salariales pactadas en el resto de convenios colectivos de otros sectores productivos de esta misma provincia.

Desde Apel-Afelin subrayan que este incremento, pactado entre los sindicatos y el Gobierno, se acuerda cuando ya está iniciado el ejercicio económico y ya se había comunicado a los clientes las tarifas vigentes para el año 2023. "Esta tardanza en la publicación del SMI para el año en curso es una dificultad más para su repercusión",  apuntan.

Los empresarios reiteran, por otra parte, que el SMI tiene "un impacto muy diferente dependiendo del ámbito geográfico donde se aplique". Según indican, hay evidentes diferencias entre el coste de la vida en un pueblo de la España vaciada que en las grandes ciudades. En este sentido, afirman que en la provincia de Huesca el salario mínimo actual está muy por encima del 60% del salario medio, según los datos de la Agencia Estatal de la Administración Tributaria.

Ape-Afelin resaltan que "la mayoría de las trabajadoras del sector están cobrando por encima del SMI, tal y como han manifestado públicamente algunas de ellos". Señalan que el conflicto viene generado por "unas diferencias en cuanto a los conceptos" que se incluyen en el cómputo del SMI, que reclaman que se equipare al salario y que ahora incluye, además de este, antigüedad, plus de transporte y otras primas. 

En relación al complemento salarial de antigüedad, la patronal destaca que hay sentencias judiciales que avalan la absorción, por lo menos, de la generada a partir del 2013. "Además, se está pendiente de sentencias que, probablemente, la consideren absorbible en su totalidad, cuestión que veremos a posteriori", añade.

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