Una cerveza para unir a todas las generaciones de Campo
Pablo Latorre lanza, tras dos años de trabajo, la Cerveza Chinchana para representar al pueblo de Campo (Huesca) y sus tradiciones
Unir la pasión de la cerveza con sus orígenes. La idea de Pablo Latorre, un joven vecino de la localidad de Campo (Huesca), conseguía materializarse este verano tras un año y medio de trabajo. "Soy un enamorado del Pirineo y de la cerveza... La verdad no se me ocurre mejor combinación", confiesa.
Dos meses encerrados dieron lugar a muchas ideas, alguna incluso disparatadas. Fue entonces cuando Latorre comenzó a desarrollar un proyecto de negocio diferente a su profesión -se dedica a la producción audiovisual en la empresa oscense Dopamina Producciones- y que conseguía hacer realidad. "Llevaba mucho tiempo queriendo crear un negocio que tuviera que ver con mi pueblo", cuenta el joven.
Unión, tradición y baile
Esta cerveza artesanal y su nombre hacen un homenaje a Campo y sus tradiciones. Un zumo que sienta las bases de lo que "deben ser unas fiestas de un pueblo: unidad, jolgorio y futuro", cuenta Latorre.
La chinchana es un baile tradicional del último día de las fiestas mayores de esta localidad oscense. "Es un momento mágico de unión entre todas las generaciones del pueblo. Todos tenemos el recuerdo de bailar la chinchana con nuestros abuelos, con nuestros padres y seres queridos", narra Latorre. "Es el baile de toda una vida", cuenta.
Latorre es el único socio del proyecto, aunque cuenta con un equipo de trabajo compuesto por diferentes profesionales, entre ellos las empresas aragonesas Dopamina Producciones y La Colmena Creativa.
Para la creación de este zumo de cebada trabaja con Click & Brew. Aunque la idea y las características de la cerveza son propuesta del joven, el proceso de fabricación se realiza junto a esta fábrica colaborativa ubicada en Lérida. La fábrica pone a disposición todo el material y los conocimientos necesarios para poder desarrollar el producto tal y como se ha previsto. "Es un lujo trabajar con ellos", añade Latorre. En esta ocasión, se han utilizado diferentes tipos de maltas y lúpulos para "intentar recoger todos los matices, sabores y olores que representa este baile, el pueblo y la comarca de la Ribagorza", explica Latorre.
Desde junio, la cerveza chinchana puede encontrarse en todos los bares y restaurantes de Campo. "Una vez acabe el verano la idea es expandirse sobre todo por la Ribagorza para posteriormente el resto de Aragón", añade.Con la ilusión intacta y una acogida espectacular, "el primer lote se ha vendido antes de que se acabe el verano, pero no hay problema, ya está en marcha el siguiente", adelanta el joven.
