Aragón concertará la atención a 21 menas por 698.000 € hasta 2024
Contempla un coste de 75 euros al día por alojamiento y manutención por persona en una vivienda.
El Instituto Aragonés de Servicios Sociales, de la Consejería de Ciudadanía, necesita concertar servicios de atención inmediata y de emancipación de 21 menores migrantes no acompañados. Para ello ha convocado un concierto social por un importe máximo de 698.000 euros, que compensaría los costes del 1 de agosto de este año al 31 de diciembre de 2023, aunque se podrán formalizar sucesivas prórrogas. En los últimos años, la cifra de menas asistidos se ha ido reduciendo.
La atención a los menores se realizará en dispositivos que estarán bajo la supervisión de entidades sin ánimo de lucro y formarán parte de la red de servicios a la infancia. Un estudio identificará el proyecto migratorio de los menores y realizará reconocimientos médicos generales.
Al calcular el importe del concierto se ha tenido en cuenta que el coste de una plaza ocupada, en servicio completo, será de 75 euros en el caso de los menores en régimen de atención inmediata y autonomía, y de 37 euros para el programa de transición a la vida independiente.
La unidad concertada incluye la atención a 15 menores migrantes no acompañados en guarda y tutela cuyo plan individualizado determina su acogimiento de forma inmediata en Zaragoza y la garantía de que se aportará un plan de autonomía personal y, también, la prestación de un servicio completo de transición a una vida independiente para seis personas jóvenes una vez cumplida la mayoría de edad. El servicio a prestar consiste en aportar la vivienda adecuada y la gestión educativa.
Se incluye en los pliegos las características que deberían cumplir las viviendas "adecuadas" para la gestión de servicios. Y, en atención a las normas de calidad del acogimiento residencial, la estructura se corresponderá con la de una vivienda unifamiliar aislada, pareada o adosada, que deberá estar ubicada en un emplazamiento tranquilo, con entornos amplios y con disponibilidad de espacios al aire libre. El mobiliario deberá guiarse por criterios de confort, calidez, comodidad, durabilidad y seguridad. Deberá contar con habitaciones individuales o dobles, cocina completa, dos baños y sistemas de climatización.
Tan importante como garantizar una estancia confortable, o incluso más, es cumplir los protocolos que asegurará que los menores están bien atendidos. Cada uno de los usuarios tendrá un expediente individual que incluirá, según la normativa vigente, la fecha inicial de recogida de datos, el plan general de actuación educativa, el proyecto educativo individualizado y su historia clínica.
La gestión residencial incluirá los servicios de comidas, limpieza, lavandería y mantenimiento. La entidad que asuma el concierto suministrará una pensión alimentaria completa que consistiría en el desayuno, el almuerzo, la comida, la merienda y la cena de los niños residentes y de los educadores.
Deberá garantizar, además, personal suficiente y con la titulación necesaria para atender a los menores las 24 horas del día. Organizará, para ello, turnos de trabajo y ajustará los empleos en función del número de niños atendidos. Correrán a cargo de la entidad los gastos de alimentos, la reposición de ropa y calzado, los gastos médicos y farmacéuticos, el material escolar y de ocio, los traslados y la movilidad.
