"Únicamente los dos años de pandemia han interrumpido su representación. Hay documentos que demuestran que la Bajada del Ángel no dejó de recrearse ni siquiera durante la guerra". En Ariza aguardan con ansia que llegue el próximo sábado para volver a disfrutar de una recreación cuyos orígenes se remontan al 1903. "Aquel año Florencia Labaila fue el primer ángel. Imagina lo arriesgado que era entonces sujetar y bajar con un arnés, pero ella volvió a repetir otro año más", explican desde el Ayuntamiento de la localidad zaragozana, donde cuenta también que los hermanos de Florencia, Angélica y Félix también ejercieron de ángeles.

Pero, ¿qué es y en qué consiste esta singular tradición? "Se trata de una ceremonia en el que se representa la aparición de un ángel a la Virgen María para anunciarle la Resurrección de su hijo. Se lleva a cabo el Sábado de Gloria y es un acto único en Aragón y apenas un puñado de localidades en toda España (Tudela, Aranda de Duero o Peñafiel) realizan una representación similar", explican fuentes municipales.

La figura del Ángel llegó a Ariza de la mano de Jacinto Labaila Gorriz, quien vio esta tradición en un viaje a Peñafiel y decidió importarla a tierras de la comarca de Comunidad de Calatayud. Labaila era carpintero –y director de la banda de música– y se puso manos a la obra fabricando tres arcos de madera, uno de los cuales colocó en la plaza del Hortal para representar la Bajada.

Ariza, además, presenta la singularidad de ser el único municipio en toda España en el que se recita una poesía para transmitirle el mensaje a la Virgen. Unos versos escritos exprofeso para este acto por vecinas del pueblo, que tienen su origen en los rezos de las monjas del Amor de Dios allá por la década de 1950. y allegados a la familia del ángel.

Heraldo

Actualmente el Ayuntamiento de Ariza está en trámites para que esta tradición sea declarada Fiesta de Interés Turístico por el Gobierno de Aragón y para este verano está prevista la publicación de un libro que recogerá la historia y tradición de la Semana Santa en Ariza, donde tienen documentadas a todas las personas que han representado el ángel desde hace más de un siglo.

Túnicas y arnés

La edad del ángel siempre está en torno a la Primera Comunión, aunque ha habido ‘intérpretes’ de 7 e incluso 6 años. "Si es niña va vestida con una túnica blanca adornada con unas pasamanerías doradas, sandalias blancas y alas", explican en el pueblo. En 2006, tras muchos años de haberlo hecho niñas, Tomás Moreno Santander ‘echó el Ángel’ y se le vistió de color azul, con unos pantalones bombachos y unas albarcas plateadas.

Por debajo de la túnica llevan un arnés con unas anillas donde se mete el gancho en el que se sujetará una barra que dos adultos –normalmente los progenitores– sostienes desde lo alto del arco para hacerlo descender.