La implantación del ancho europeo para reabrir el Canfranc costará 227 millones

El Ministerio abre plazo de alegaciones al estudio informativo para convertir el último tramo de 138 km desde Huesca. Las obras se prolongarían durante 14 meses y obligarían a cerrar la línea durante 18 semanas.

Un tren regional llegando a la nueva estación internacional de Canfranc.
Un tren regional llegando a la nueva estación internacional de Canfranc.
Verónica Lacasa

La implantación del ancho europeo en el último tramo pendiente de la línea Zaragoza-Canfranc para posibilitar la anhelada reapertura internacional -desde Huesca hasta la estación internacional- supondrá una inversión de entre 227 y 237 millones de euros. Las obras se prolongarían durante 14 meses y obligarían a cortar el tráfico ferroviario 14 semanas

El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha abierto un plazo de 30 días para presentar alegaciones al estudio informativo para convertir el tramo Huesca-Canfranc, que actualmente tiene ancho ibérico, con el objetivo de garantizar la interoperabilidad de la línea entre Zaragoza y Pau, de 310 km de longitud, al tráfico internacional de pasajeros y mercancías. En paralelo, el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) ha licitado también el contrato para la redacción del proyecto por un importe de 1,1 millones y un plazo de diez meses

El ancho europeo llegó a la estación de Huesca en el año 2003, pero queda por implantarlo en los 138 km restantes hasta Canfranc. También falta acometer las obras de renovación de 80 km de vía de los tramos Plasencia del Monte-Ayerbe (adjudicadas recientemente), Ayerbe-Caldearenas y Jaca-Canfranc. Esas mejoras pendientes obligan a limitar la velocidad y también la carga, e impiden la circulación de dos locomotoras simultáneamente. Mientras, en el lado francés, aún no se han puesto en servicio tampoco los 32,5 km entre Bedous y el túnel de Somport

El estudio contempla dotar a toda la línea Zaragoza-Canfranc-Pau de ancho estándar europeo (1.435 mm); gálibo uniforme GB en los túneles; una carga máxima de 22,5 toneladas; señalización Ertms; apartaderos de 450 metros de longitud para permitir el cruce y apartado de trenes; y estaciones, apeaderos y apartaderos adaptados a ese mismo ancho y con acceso para pasajeros con movilidad reducida. Aunque se excluye la electrificación de la línea (debe estar en funcionamiento antes de 2050), al menos sí definirá las actuaciones a realizar -rebaje de la rasante hasta 15 cm- para que se pueda instalar en los túneles una catenaria a más largo plazo. 

El proyecto incluye la supresión de los 35 pasos a nivel en los 14 términos municipales por los que discurre este tramo y su sustitución por 19 nuevos pasos superiores y tres inferiores. Además, en el ramal que comunica Tardienta con Huesca se implantará el ancho mixto para poder acceder a la plataforma logística Plhus. Y en la estación de Canfranc se habilitarán un mínimo de cuatro vías.

Los trabajos, que solo incluyen pequeñas mejoras de trazado para aumentar la velocidad de paso, se desarrollarán en dos fases. En la primera, que durará 13 meses y obligará a cortar el tráfico durante 14 semanas, se acometerán todas las obras manteniendo el ancho ibérico actual ya que el cambio al ancho europeo se realizará en la segunda fase (4 semanas), cuando se vaya a realizar la reapertura del túnel del Somport. Para ello, se instalará una superestructura polivalente que permita llevar a cabo esta modificación con un simple cambio de posición de los carriles. Durante el tiempo de interrupción de los servicios se habilitará un transporte alternativo por carretera cuyo coste se ha estimado en 195.000 euros, y quedará interrumpido el tráfico de mercancías.

Viajes de 5 horas entre Zaragoza y Pau

Una vez completada la conversión y reabierta la línea, se prevé que haya servicios de media distancia españoles (Zaragoza-Canfranc) y franceses (Pau-Canfranc), y también  internacionales entre Zaragoza y Pau de pasajeros y de mercancías (estos últimos trenes deberán efectuar maniobras de enganche y desenganche de una segunda locomotora en la estación internacional). 

La velocidad de la línea entre Huesca y Canfranc será muy variable, de entre 60 y 160 km/h y el plan de explotación prevé cuatro servicios internacionales diarios entre Zaragoza-Pau para viajeros (entre ida y vuelta) con una duración aproximada de 5 horas con material diésel, y otros dos de mercancías de entre 9 y 11 horas.

El estudio hace una valoración económica que varía ligeramente en función de si se incluyen los trabajos necesarios para dejar listos los túneles de cara a la futura electrificación y de la configuración final del haz de vías de la estación de Canfranc. De allí que el presupuesto final oscile entre 227 y 237 millones de euros. Los principales costes corresponden a las obras en la vía (de 55,5 a 56,7 millones), las estructuras (27), la señalización y las comunicaciones (23,5), y los túneles (de 10 a 15).

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión