La nueva estrategia de control de la covid no contabilizará todos los contagios como ahora

El Ministerio, junto a las comunidades, podría impulsar otro sistema centinela para vigilar la siguiente fase de la pandemia.

Un posible paciente de covid-19 se somete a una PCR en la sede del 061 en Zaragoza
Un posible paciente de covid-19 se somete a una PCR en la sede del 061 en Zaragoza
José Miguel Marco

Aragón avanza hacia la nueva normalidad en convivencia con el virus SARS-CoV-2 al cumplirse dos años desde el inicio de la pandemia de coronavirus, con la vista puesta en seguir protegiendo a los colectivos más vulnerables. Y lo hará, con un sistema de vigilancia epidemiológica diferente al que ha primado hasta ahora a través de una red centinela en la que no se contará caso por caso ni se buscarán activamente los contactos estrechos mediante pruebas diagnósticas. El modelo que centralice la información en la siguiente fase del control de la covid se definirá la próxima semana en Zaragoza, en un encuentro entre el Gobierno y las comunidades autónomas.

Desde hace semanas está encima de la mesa el cambio en la comunicación de los datos de la pandemia a un modelo similar al de la gripe. Desde la Consejería de Sanidad adelantan que esta nueva estrategia está todavía en discusión y, en todo caso, será implementada por todas las comunidades. Tal y como adelantó hace unos días el director general de Salud Pública, Francisco Javier Falo, ya no va a tener sentido diagnosticar todos los contagios, sobre todo porque muchos de ellos tienen el perfil de una infección respiratoria leve, como un catarro, una gripe, un rinovirus o un virus respiratorio sincitial. Y su control se podría limitar a colectivos vulnerables o a ámbitos sanitarios o sociosanitarios. Más que ver caso por caso se tratará de observar tendencias, comprobar la evolución del virus y detectar un aumento o posibles variantes que activen las alarmas. 

Con esos datos se elaboraría un informe semanal en base a determinadas muestras aleatorias entre personas con síntomas, que ofrecería así una aproximación estadística. En Aragón, la red centinela para la vigilancia de la gripe se paralizó por la pandemia y hace unos meses se activó el sistema de vigilancia centinela de Infección Respiratoria Aguda Grave (Irag) en los hospitales, con el que se vigila la gripe y la covid-19 de forma conjunta, además de cualquier otro virus respiratorio o posible agente etiológico emergente en el futuro. Esta red de médicos centinela se implementa con la colaboración de Medicina Preventiva y del Servicio de Microbiología del Miguel Servet.

La tendencia descendente de la séptima ola de covid en Aragón y las amplias coberturas de vacunación entre la población, con más del 88% de los mayores de 5 años con la pauta completa, abren un nuevo escenario en la gestión de la pandemia. Para Federico Arribas, secretario de la Sociedad Española de Epidemiología y profesor de Salud Pública en el campus de Huesca, "la vigilancia se va a ir centrando en personas que presenten gravedad o sean frágiles". Tal y como recuerda, en Aragón se creó una red centinela para la vigilancia de la gripe en el año 2000. Estaba compuesta por médicos de Atención Primaria que vigilaban una muestra representativa de la Comunidad, que suponía en torno al 6,5% de la población aragonesa. Sus objetivos eran estimar la incidencia de la gripe en Aragón o conocer la tipificación de los virus circulantes. 

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