La Navidad en el cine es de los antihéroes

¿Quién dice que en Navidad es todo alegría y felicidad? Sin duda, los anuncios, escaparates y películas se empeñan en lanzarnos este mensaje una y otra vez. Y cada año empiezan más pronto. Tanto es así que las carteleras, aprovechando el tiempo libre de los niños (no tanto de las familias) durante las vacaciones de Navidad, se llenan de títulos con temática pastelona y bienintencionada. Que si película de dibujos, que si comedia romántica, que si salvemos la Navidad... Pero ¿es así? ¿Nos invade el espíritu navideño y el buen rollo que nos impulsa a ver 'pelis moñas'?

Pues parece que no. Según datos de BoxOfficeMojo.com que recoge las cifras de recaudación de las salas, la película de temática navideña más taquillera de la historia en todo el mundo es 'El Grinch'. La película de animación 2018 de Illumination Entertainment recaudó 512.492.755 dólares, desbancando a la gran 'Solo en casa', que ostentó el título durante casi tres décadas. La secuela, 'Solo en casa 2: perdido en Nueva York' es la siguiente y en cuarto lugar, ¡ojo! volvemos a tener al Grinch. Esta vez se trata de la versión que en 2000 protagonizó Jim Carrey bajo capas y capas de pintura verde. La quinta plaza de este ranquin es para 'Un cuento de Navidad'. La adaptación del cuento de Dickens que en 2009 fue dirigida por Robert Zemeckis en animación 3D. El resto de la lista la completan títulos más amables y románticos.

Recapitulemos. El 'grinch' es un personaje verde, raro, inadaptado socialmente que quiere robar la Navidad porque no soporta las lucecitas, los cánticos y la falsa alegría que todo lo inunda cuando se aproximan estas fechas. Kevin, o Macaulay Culkin-niño, es un pobre chaval al que sus padres ¡olvidan! en casa ¿Acaso se puede tener experiencia más traumática? Y el señor Scrooge, del cuento de Dickens, en fin... Un cascarrabias y un avaro. Una vez más, parece que al público le atraen los antihéroes, esos personajes que no acaban de encajar en los cánones sociales y que parecen ir a la contra.

Eso sí, al final en todas ellas (¡Atención 'spoiler'!) el azúcar se impone y todo vuelve a su cauce. La Navidad sigue su curso, poderosa y buenrollista para que el 'grinch' devuelva los regalos, el señor Scrooge esboce una sonrisa y Kevin disfrute con su familia de una maravillosa y entrañable NocheBuena.