La aportación extra de lana de oveja a nidos de quebrantahuesos contribuyó al vuelo de 30 pollos en Aragón en 2021
El proyecto promovido entre 2020 y 2021, trabaja en varios puntos del territorio nacional como la Sierra de Gredos, el Sistema Ibérico turolense, la Cordillera Cantábrica y los Pirineos.
La aportación de lana de oveja para la mejora de la estructura de los nidos de quebrantahuesos ha contribuido a la recuperación de la especie en Aragón, donde este año 2021 se ha contabilizado el vuelo de 30 nuevos pollos en el marco del proyecto 'Monirepro QH', desarrollado por la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos (FCQ).
El proyecto promovido entre 2020 y 2021, trabaja en varios puntos del territorio nacional como la Sierra de Gredos, el Sistema Ibérico turolense, la Cordillera Cantábrica y los Pirineos y cuenta con financiación de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, así como con el apoyo de los gobiernos autonómicos de Aragón, Asturias, Cantabria y Castilla y León.
Además, la Fundación Quebrantahuesos destaca otra de las medidas que está contribuyendo a la recuperación de esta especie que estuvo al borde de la extinción. Se trata de la selección de emplazamientos destinados a 'hacking' (cría campestre en aislamiento humano), para la liberación progresiva de una especie para conseguir su asentamiento y reintroducción.
Asimismo, señala la colocación de señuelos de "gran realismo" en emplazamientos estratégicos de la Sierra de Gredos, que en 2021 han instalado tres señuelos en las áreas de mayor frecuentación por la especie con asentamientos temporales desde la sierra de Cazorla o Pirineos para lograr el asentamiento definitivo de estos ejemplares con territorios regentados de forma regular.
Por último, resalta la coordinación para la autorización de cinco áreas de depósito de cadáveres a ganaderos por parte del Gobierno de Aragón, que alcanzó dos acuerdos de custodia en Pirineos y el Sistema Ibérico zaragozano con ganaderos, e igualmente una asociación interesada en la alimentación suplementaria de aves rapaces necrófagas.
La FCQ recuerda que la desaparición del quebrantahuesos en la Península a lo largo del siglo XX se frenado a partir de la década de los años 90 con una "lenta pero constante" recuperación demográfica que se inició en la zona de los Pirineos, con el "refuerzo de ejemplares en proyectos de reintroducción" que alberga en la actualidad "la esperanza" de una recuperación "parcial" en las montañas del país.
