Un año de cárcel por robar 58.000 euros en una empresa de ganadería

La Audiencia de Zaragoza juzgó ayer a dos delincuentes habituales –Juan F. G. y Ángel M. C.– por el robo con fuerza de unos ganchos para granjas de animales valorados en más 58.000 euros. El delito se cometió entre el 25 y el 28 de enero de 2019 en la empresa Fabricantes y Ventas para Ganadería (Favega) Equipamientos S. L., situada en una nave del Polígono el Olivar, en la carretera de Logroño.

Aunque el fiscal les solicitaba a los dos acusados una pena de seis años de prisión respectivamente por haber hecho la sustracción en un establecimiento público, acabaron pactando un acuerdo de un año de prisión para ambos entre el fiscal Fernando García Vicente y las defensas, que llevan Olga Oseira y Alejandro Jiménez.

Los dos ladrones (que tienen un historial largo con más de cinco condenas por robos con fuerza) acudieron esos días (viernes y lunes) a la nave 11 del citado polígono y reventaron el bombín de la puerta de entrada para proceder a la sustracción. Provocaron daños por valor de 120 euros en la puerta y luego se apropiaron del material de la empresa, que en este caso costaba, concretamente, 58.447,76 euros.

La investigación llevada a cabo posteriormente por la Guardia Civil detectó que el pasado 28 de enero de 2019, poco después de perpetrar el robo, se dirigieron a la Chatarrería Shunde Los Hermanos, en la calle Jaime Ferrán, para vender un total de 1.900 ganchos por los que cobraron 1.140 euros. Además, un género valorado en 1.660 euros fue devuelto a los propietarios.

Todo lo demás, sin embargo, no se ha recuperado y su valor asciende a más de 56.000 euros. Aun así, la empresa Fabricantes y Ventas para Ganadería tenía suscrito un seguro con Zurich y le indemnizó por los daños sufridos, tanto en la sustracción del material como en el bombín reventado.

Insolventes y sin cárcel

«Aunque les imponen los daños para devolverlos, los acusados son insolventes y no los sufragarán. Aun así, el pacto les ha servido para no tener que entrar en prisión porque los dos tienen bastantes antecedentes», valoró la abogada defensora Olga Oseira. Los acusados se sentaron en el banquillo hasta que dieron el sí al acuerdo de la pena de un año.