Cataluña, la exhumación de Franco y el bloqueo de la derecha y la izquierda que arrastró al país a una repetición electoral han sido los argumentos que han centrado este viernes la intervención de la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, que ha regresado a Zaragoza en plena precampaña electoral para insistir en que "el PSOE es la única formación capaz de garantizar la unidad del país" y de "dar estabilidad" durante cuatro años. La socialista ha cargado contra aquellos que piensan que "España es solo una palabra que no se traduce en compromisos"; los mismos que bloquean la gobernabilidad sin ofrecer alternativas y se ponen de perfil cuando se requiere de su ayuda en Cataluña.

Durante más de 45 minutos ha buscado Calvo convencer a los más de 300 simpatizantes que han acudido al acto que se ha celebrado en la sede del partido, recordando que el PSOE es un partido "decente", con gente "sensata y resistente", que durante los diez meses que ha gobernado ha movido piezas para que los ciudadanos entiendan que "la política sirve para avanzar hacia la justicia social y la solidaridad". Ante una campaña electoral que girará en un "todos contra el PSOE, por lo que representamos", la vicepresidenta en funciones ha insistido en garantizar durante los cuatro próximos años "estabilidad" para las decisiones importantísimas que se deben adoptar, entre las que ha incluido la reforma del sistema de financiación autonómica y la transición energética frente al cambio climático.

La actualidad ha condicionado buena parte de la intervención de la socialista, que ha afeado a los líderes políticos que se escudaran en su juventud para evitar posicionarse sobre la exhumación de Franco. "Menudo nivel de dos políticos que no quiere conocer la historia de su país", ha reprochado.

Más dura ha sido con la escasa lealtad que han mostrado con la situación de Cataluña, en la que se ha congratulado de que lo peor haya pasado "sin ningún problema irreversible". Sus críticas han llegado, también, a los separatistas, al advertir de que "no tiene nada de progresista deteriorar tu propia tierra engañando a los catalanes con la independencia". A los constitucionalistas les ha insistido en que el PSOE es "el único partido que puede garantizar la unidad de España" porque en el País Vasco, Cataluña, Navarra y Galicia los votantes les "responden en las urnas". Es fruto, según ha expresado, de la concepción de los socialistas de que "la diversidad territorial es el sustrato de la unidad".

El secretario general del PSOE-Aragón, Javier Lambán, que se ha autoproclamado  "antiindependentista convencido", ha querido dejar constancia de la lealtad de la DGA al Gobierno de Pedro Sánchez en Cataluña, y ha agradecido que cuatro ministras y Calvo hayan visitado la Comunidad esta semana.

En una de las escasas apariciones conjuntas de Lambán y Susana Sumelzo, la cabeza de lista al Congreso por Zaragoza ha destacado la importancia de votar el próximo 10 de noviembre para elegir entre "avanzar y progresar o bloquear y retroceder". "España se merece seguir avanzando con igualdad", ha resaltado, y ha detallado los logros del PSOE durante los 17 meses transcurridos desde que llegaron al Gobierno, entre los que ha citado la subida del Salario Mínimo Interprofesional y el retorno a un sistema de salud universal y gratuito.

También ha participado en el encuentro con simpatizantes Pilar Alegría, jefa de la oposición en el Ayuntamiento de Zaragoza, que ha puesto en valor la "jornada histórica" que se vivió el jueves gracias a que "los tres poderes encontraron la solución a una deuda del país con la democracia". Ha lamentado, además, que cuando las tres derechas han sumado han llegado a acuerdos, como le ocurrió a ella en el Consistorio de la capital aragonesa.